Informe

Peticiones de favores sexuales bajo amenaza de despido o sextorsión: el acoso sexual se ceba entre las comunicadoras

La Agrupación de Periodistas de CCOO considera necesarias medidas de sensibilización y campañas de información para identificar el acoso sexual, que afecta a la mayoría de trabajadoras

En la encuesta participaron cerca de un centenar de profesionales de medios de comunicación.

En la encuesta participaron cerca de un centenar de profesionales de medios de comunicación.

María G. San Narciso

Millones de personas pudieron ver, el pasado mes de septiembre, cómo un hombre que pasaba por la calle tocaba el culo a la reportera Isa Balado. Lo hizo en pleno directo para En Boca de Todos, un programa de actualidad de Cuatro. Aunque aquella agresión llamó la atención por el descaro de la acción, en general, la gran mayoría de trabajadoras de los medios de comunicación sufren gestos como ese, y otros muchos más sutiles, a lo largo de toda su carrera. Dentro y fuera de las redacciones.

Según una encuesta realizada por la Agrupación de Periodistas de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras (FSC-CCOO), muchas de estas profesionales han vivido comportamientos tipificados como acoso sexual al menos una vez a lo largo de su carrera, aunque estiman que un 27% tiene dificultades para reconocerlas como tal y ponerles nombre. Les preocupa especialmente, como apuntan en el informe, que hasta un 11% manifieste haber sido objeto de peticiones de favores sexuales bajo amenaza de despido, haber sufrido relaciones sexuales no consentidas y haber sido víctimas de la difusión de imágenes suyas de contenido sexual.

En concreto, la encuesta ha sido respondida por casi un centenar de mujeres trabajadoras de medios de comunicación y agencias de noticias. La mayoría de ellas son periodistas, fotógrafas, diseñadoras y editoras que han revelado, por ejemplo, que las conductas de acoso sexual más habituales en las redacciones son los chistes, bromas o piropos con intencionalidad sexual (87%). Les siguen las miradas o gestos lascivos (78%) y los comentarios o valoraciones ofensivas sobre el aspecto físico o la apariencia (69%).

En total, el 84% de las comunicadoras que han participado aseguran haber sufrido alguna situación de acoso por razón de sexo, al menos una vez a lo largo de su carrera profesional. Entre las más mayoritarias está el haberse sentido tratadas como si fueran menores de edad o personas dependientes, haber escuchado expresiones sexistas y denigrantes para minusvalorar sus capacidades, ignorar sus aportaciones o cuestionar su trabajo por el hecho de ser mujer.

Falta de apoyo

"Un compañero de otra área aprovechaba las horas en las que me encontraba trabajando sola para hacerme comentarios obscenos y realizar tocamientos. Lo llamaba ‘el juego del gato y el ratón’. Pedí ayuda a algunos de mis compañeros y, sabiendo que eso que me pasaba a mí le había sucedido a otras compañeras antes. Me la negaron", asegura una de las encuestadas. "El director de un periódico (…) necesitaba periodistas, pero no mujeres porque ‘nos quedamos embarazadas’, y añadió 'es verdad que las mujeres periodistas tenéis ventaja a la hora de buscar información", contó otra.

En total, el 17% de las mujeres que relataron una experiencia de acoso señalan que este hecho contado es algo habitual en la empresa, además, el 52 % indican que fueron situaciones que se repitieron en el tiempo. "Lamentablemente, en el 13% de las respuestas, las informadoras participantes tuvieron que abandonar la empresa e, incluso, cambiar de profesión. Algunas de ellas habían comunicado su situación a un superior o interpuesto una denuncia antes de tomar la decisión de abandonar su puesto de trabajo", apuntan.

Un 59% de las encuestadas que relataron situaciones de acoso no lo comunicaron a la empresa ni recurrieron a los canales diseñados para combatir estas prácticas, y hasta un tercio reconocía no saber qué hacer ante una situación así. Esto lleva a la Agrupación de Periodistas de FSC-CCOO "a concluir que es imprescindible amplificar en los centros de trabajo la información sobre la existencia de protocolos de acoso sexual y la forma de actuar para denunciar estos actos". Todo ello a pesar de que la consulta también destaca que cuando las empresas actúan, los resultados son positivos y los hechos causantes tienen un menor impacto negativo para la víctima.

Actuar contra el acoso

El trabajo de campo hecho por CCOO aborda la diferencia entre acoso técnico y acoso declarado, es decir, que una mujer señale haber vivido al menos una de las situaciones tipificadas como acoso sexual y/o por razón de sexo (acoso técnico), pero, al mismo tiempo, no sepa identificar estos comportamientos como "actos que atentan contra la libertad o indemnidad sexual de otra persona" (como recoge el artículo 184 del Código Penal). Pues hasta el 92% de las participantes entran en este grupo, frente al 40% que sí reconoce explícitamente haber sufrido este acoso en su trabajo.

Con estas conclusiones sobre la mesa, la Agrupación de Periodistas de FSC-CCOO ha elaborado una serie de propuestas, que pasan por realizar campañas de información y sensibilización sobre el acoso sexual y/o por razón de sexo, implicar a las empresas en la implantación de Códigos de Buenas Prácticas e incidir en la importancia de las evaluaciones de riesgos psicosociales en el entorno laboral.

El objetivo es acabar con todas estas experiencias de acoso, sobre todo cuando todas y cada una de ellas "provocan un impacto negativo en la salud de la víctima, y en su vida personal, laboral y social".