Acaba una semana trágica en la provincia de Castellón. A la muerte de un trabajador en un accidente laboral en una fábrica de Onda, se suman las defunciones de dos ancianos en sendos incendios en sus casas. Los fuegos se produjeron en la Ribera de Cabanes, el lunes, y en Torreblanca, el jueves, y las llamas se cobraron las dos primeras vidas del 2021 con tan solo 72 horas de diferencia.

En lo que va de año se han registrado más de 60 fuegos en domicilios, según datos del Consorcio Provincial de Bomberos, el último ayer por la mañana en Onda.

El pasado lunes, un hombre de 80 años fue hallado carbonizado en su masía de la Ribera de Cabanes. Las llamas afectaron gravemente a toda la casa y llegó a provocar el derrumbe de parte del techo. Según los bomberos, el fuego llevaba varias horas de evolución cuando el dispositivo de emergencias acudió a la vivienda, poco antes de las 7.00 horas.

Otro anciano, de 89 años, pereció tres días después en otro virulento incendio en su casa de la calle Calvario de Torreblanca. Asimismo, una mujer de 86 años tuvo que ser atendida por inhalación de humo y fue trasladada posteriormente al Hospital General de Castelló en ambulancia. La carga térmica alcanzada fue tal que uno de los bomberos, de 47 años, sufrió un síncope por el calor, recibiendo asistencia por parte de los médicos movilizados, aunque sin necesidad de acudir a ningún centro hospitalario.

Por el momento, no ha trascendido el origen de los siniestros en ninguno de los dos incendios mortales registrados esta semana. La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga ambos casos. Aunque no se conocen todavía las causas de los trágicos sucesos, no se descarta la vinculación de algún dispositivo de calefacción o chimenea como desencadenantes, y es que la mayoría de los fuegos en vivienda se producen en Castellón entre noviembre y marzo, coincidiendo con los meses más fríos. Otros dos de los principales causantes hay que buscarlos en los cortocircuitos por sobrecarga de enchufes y cuando se cocina.

DETECTORES GRATUITOS

Las personas de edad avanzada son las más vulnerables a este tipo de sucesos, especialmente si viven solas. Con el paso de los años pierden capacidad de reacción y muchos de ellos padecen problemas de visión, de audición o una movilidad reducida. Por ello, las autoridades recomiendan la instalación de aparatos de detección de humo que emitan una señal acústica intensa para alertar del peligro.

La Diputación de Castellón coloca gratuitamente estos dispositivos de alerta y prevención contra incendios en las viviendas de las personas mayores de 70 años que viven solas en la provincia. Cabe recordar que los ciudadanos interesados en la instalación pueden solicitarlo por teléfono.