EL JUICIO SERÁ LOS DÍAS 21 Y 22

Un castellonense se enfrenta a 9 años de prisión y al pago de 260.000 euros por rajarle la cara a otro

El agresor le hizo un profundo corte a la víctima de frente a barbilla por celos

Imágenes del estado en el que quedó la víctima tras rajarle la cara el acusado.

Imágenes del estado en el que quedó la víctima tras rajarle la cara el acusado. / MEDITERRÁNEO

Era la Navidad del año 2017 cuando un episodio de celos a la salida de una discoteca de Castelló acabó con un brutal ataque. Un joven, que entonces tenía 20 años --J.C.E.--, rajó la cara de arriba a abajo a otro chico, de 25, haciéndole un profundo corte desde la frente hasta la barbilla con un instrumento afilado que no pudo ser encontrado por la policía. Como publicó entonces Mediterráneo, la víctima tuvo que ser intervenida quirúrgicamente y recibió nada menos que 25 puntos de sutura.

El juicio por estos hechos se celebrará en la Audiencia Provincial de Castellón los próximos días 21 y 22 de febrero y la Fiscalía pide para el procesado una pena de nueve años de prisión por un presunto delito de lesiones. En el apartado de la responsabilidad civil, el Ministerio Público solicita 260.000 euros de indemnización para la víctima por las lesiones causadas y las secuelas sufridas.

Según sostiene el fiscal en su escrito de acusación provisional, los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 23 de diciembre. Al parecer, al agresor le disgustó que la víctima hablara con su novia dentro de la discoteca, motivo por el cual, a las 6.30 horas, lo esperó a la salida, portando un objeto afilado en la mano, con intención de menoscabar su integridad física. Sin mediar palabra, presuntamente, le hizo un corte de grandes dimensiones y huyó del lugar.

El afectado precisó tratamiento médico consistente en cirugía estética, plástica y reparadora, oftalmológica, psiquiatría y psicología, quedándole varias cicatrices y teniendo parálisis parcial del músculo frontal izquierdo.

Se conocían

No eran desconocidos. Víctima y agresor tenían amistades comunes. De hecho, el hermano del atacante --que presenció la grave agresión-- había compartido mesa con el afectado esa misma noche, en la que el herido celebraba una cena por su cumpleaños.

La víctima se quedó tendida en el suelo y fue auxiliada hasta la llegada de la Policía Local y los medios sanitarios, que lo evacuaron en ambulancia hasta el Hospital General de Castellón, donde ingresó y fue operado de urgencia.

Su familia quiso incidir tras lo sucedido en la «gravedad» de las heridas producidas, que podrían haberle hecho «perder la visión de un ojo» o «costarle la vida si el corte hubiera sido unos centímetros más abajo, en el cuello», tal y como declararon la madre y la hermana del afectado en conversaciones con este periódico.

El agresor se entregó posteriormente en la comisaría provincial de la Policía Nacional y fue detenido por estos hechos.

Alejamiento y prohibición de vivir en la provincia

El Juzgado de Instrucción número 5 de Castellón dictó en enero del 2018 un auto con una orden de alejamiento por la que el agresor confeso no podía acercarse a menos de 200 metros de la víctima ni tampoco residir en la provincia mientras durara la instrucción.

La autoridad judicial le prohibió también al investigado, J.C.E., salir de España sin expresa autorización del juez y le retiró, asimismo, el pasaporte.