Testigos sobre la agresión en una colla de Castelló: fue rápida, violenta e indiscriminada

A medida que pasan las horas van conociéndose más detalles del asalto que se produjo el sábado por la noche en las fiestas de la Magdalena de Castelló, en el que una persona acabó en la UCI del Hospital General y hubo al menos una decena de heridos más de diferente consideración como consecuencia del ataque imprevisto de un grupo integrado por unas 30 personas armadas con bates de béisbol y barras metálicas, que cargaron contra una multitud que asistía a los conciertos organizados esa noche por Cosa Nostra, el colectivo antifascista con sede en la calle San Miguel de la capital.

La policía encuentra un bate ensangrentado de la agresión múltiple en la Cosa Nostra

Siguen sin trascender detalles oficiales como si se ha identificado a los autores o si se ha producido alguna detención, la investigación está abierta y en manos de la Policía Nacional. Quienes sí que relatan los hechos son los testigos, que los describen como unos minutos trágicos en los que cundió el pánico, porque las agresiones fueron indiscriminadas, «pasó todo muy rápido, pero fue muy violento». Tanto que se teme por la vida del herido más grave, ingresado en la UCI con pronóstico reservado desde el mismo sábado.

Entre las calles San Miguel, Nueve de Marzo y plaça l’Ereta habría entre 200 y 300 personas a la hora en la que se produjo el ataque. Como ya avanzó este lunes Mediterráneo, varias personas alertaron al 112 porque un poco antes de las 23.30 horas vieron pasar en esa dirección a un grupo numeroso de personas, algunas encapuchadas y con el rostro cubierto, que llevaban bates de béisbol y barras metálicas. Poco después, Emergencias recibía el aviso de que había heridos en esa misma zona.

Desde Cosa Nostra aseguran que entre el público «había menores, personas mayores, con movilidad reducida, que estaban tranquilamente escuchando la música»

Entre el público asistente al evento organizado por Cosa Nostra «había menores, personas mayores, con movilidad reducida, que estaban tranquilamente escuchando la música», explican desde el mismo colectivo. Algunos de los presentes, en cuanto fueron conscientes de lo que estaba sucediendo, «hicimos un cordón para proteger a la gente» y fueron los que se llevaron la peor parte al recibir los golpes, afirman.

Algunos de los agresores fueron identificados por los testigos por llevar la cara descubierta y ser «conocidos miembros de grupos ultras»

Los agresores huyeron con rapidez, aunque antes algunos fueron identificados, por ser «conocidos miembros de grupos ultras» con antecedentes. Si bien entre ellos los había embozados, otros iban a cara descubierta.

La víctima más grave era un asistente más del concierto, vecino de Vila-real. Aseguran que tras golpearle en la cabeza «trataron de rematarlo en el suelo, iban a matar». 

Reacciones al suceso

Desde Cosa Nostra no dudan sobre la naturaleza del ataque y en sus redes sociales señalaron al concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Ortolá (Vox), al que consideran un «incendiario» y «máximo responsable de todos los incidentes ocurridos».

En respuesta, el aludido dijo que «solo buscan crear polémica y empañar nuestras fiestas». Mostró su rechazo por los hechos y condenó «firmemente todo tipo de violencia, sin importar su origen o justificación».

En Cosa Nostra no se limitan a responsabilizar al edil, también cuestionan la intervención policial. Afirman, entre otras cosas, que «no hicieron nada» por detener a los agresores, pero sí que «amenazaron» a quienes se defendían de la agresión y que no dejaron acceder a la ambulancia para atender al herido «tuvimos que llevarlo en volandas».

Desde el consistorio niegan tajantemente tal versión. Remarcan que «la prioridad de la policía son las personas y su seguridad» y que acudieron «porque se requirió un servicio sanitario».