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BALONCESTO

El TAU Castelló se queda sin tiempo para culminar la remontada ante el Lucentum (69-73)

Los 'azulejeros' mejoran tras el descanso pero se quedan sin oxígeno en la recta final

Óscar Alvarado supera a Noguerol en el TAU Castelló-HLA Alicante.

El TAU Castelló llegó un pelín tarde para poder llevarse el triunfo en el derbi autonómico en LEB Oro que le enfrentó al HLA Alicante, un rival directo en la lucha para meterse en los play-off (69-73). El conjunto castellonense no rayó al nivel defensivo deseado hasta después del descanso y luego estuvo cerca de la victoria con un gran trabajo defensivo en el tercer y último cuarto, pero le faltaron una pizca de acierto y suerte.

El choque empezó de manera vibrante, con ataques acertados de ambos. Brillaba el veterano base visitante Llompart, dirigiendo con criterio a los suyos y anotando cuando la ocasión le era propicia. En el bando local, la mayoría de puntos llegaban cerca del aro. Una vez se sentó Llompart, al TAU pareció irle algo mejor, aunque Pilepic pasó a ser en ese momento el nuevo quebradero de cabeza.

En el siguiente periodo, el conjunto anfitrión tuvo que buscar alternativas para anotar, pero no las encontraba. De hecho, en cuatro minutos logró solo tres puntos, lo que provocó un primer estirón serio de los alicantinos (22-30, min. 16). Además, la defensa del TAU debía mejorar, porque el Lucentum se mostraba letal en el triple (8 de 12 al descanso).

El TAU apostó por volver a poner su mejor artillería en el juego interior y, de la mano de Rozitis y Stutz, la decoración mejoró. La réplica visitante llegó también llegó de la mano de lo que había funcionado al principio, es decir, de Llompart. En cuanto los locales se acercaron, el base se sacó de la chistera nuevos trucos y bien secundado por la muñeca caliente de sus compañeros, la diferencia volvió a ponerse en torno a los 10 puntos (36-45 al descanso).

En la reanudación, al TAU se le vio con más energía en defensa. Delante, buscaba principalmente las opciones cerca del aro con Pablo Hernández. Echaba de menos una mayor aportación del perímetro, pues solo Hermanson inquietaba, con el problema añadido de que una baza importante como Höök se cargó de faltas. Sin embargo, como la defensa local asfixiaba al Lucentum, reduciendo a tres puntos la desventaja (53-56).

Tensión en el último cuarto

Ten puso en pista unos pívots más ligeros aunque aguerridos (Bilbao y Edwards) para mantener la mordiente. Un triple de Hermanson devolvió la paridad al duelo en el minuto 34. Si cada ataque era valioso, todavía más a partir de ese momento. El TAU estaba ahí, pero no terminaba de culminar la remontada (como mucho lograba empatar).

La cosa se puso fea a dos minutos del final, con un rebote ofensivo y canasta del Alicante, una pérdida local y un triple de Hearst. Parecía ya imposible con 64-71 en el luminoso y solamente 1.23 por delante. El cuadro visitante no desaprovechó su ventajosa situación, pese a que los locales lo intentaron con todas sus fuerzas. Además, una discutible decisión arbitral puso imposibles las cosas.

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