La Asociación de Hijas de María del Rosario apuró ayer sus celebraciones con la popular Festa de les Casades, que tuvo en la eucaristía matinal su momento más importante. La misa estuvo presidida por el obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López, quien compartió con centenares de asociadas y simpatizantes el fervor por la Mare de Déu del Roser.

Ya por la tarde se celebró la tradicional procesión claustral por dentro de la iglesia arciprestal. Las fieles acompañaron a la imagen de su patrona entre respetuosos cánticos religiosos, en un acto que se considera símbolo de hermandad entre todas las entidades cristianas del municipio que veneran a la Virgen.

Las últimas citas serán esta misma tarde, pues a las 19.30 horas comenzará la misa por los difuntos, a la que seguirá el retorno de la imagen desde la iglesia arciprestal a la sede rosariera.