El Ayuntamiento de Vila-real reclama a la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte mayor celeridad en la tramitación del proyecto que aún está pendiente de licitarse para reparar el parqué del pabellón del centro de tecnificación deportiva (CTD).
Fue en septiembre del pasado año 2021 cuando se dio a conocer el deficiente estado en el que, a causa de las humedades producidas por los defectos de construcción que había en la cubierta del polideportivo, se encontraba el suelo del recinto. Una situación que obliga a sustituirlo en su totalidad, con una inversión que superará los 800.000 euros, según ha podido saber Mediterráneo. Sin embargo, 10 meses después, todavía es una incógnita cuándo se licitará la actuación y, más aún, cuándo arrancarán y acabarán los trabajos que, definitivamente, permitan reabrir el recinto.
Plazos más largos
Al respecto, el concejal de Deportes de Vila-real, Javier Serralvo, hace hincapié en que desde el consistorio reclaman a la Conselleria que la obra se declare de emergencia, como ya se hizo con la de la reparación de la cubierta. No obstante, la Administración autonómica decidió declararla de urgencia, lo que alarga más aún los plazos de ejecución, al no considerarla de prioridad máxima.
«La Generalitat ha cumplido en el arreglo del techo del polideportivo del centro de tecnificación, y queremos que se siga el mismo camino en el tema del parqué»
«La Generalitat ha cumplido en el arreglo del techo del polideportivo del centro de tecnificación --en el que se ha invertido 1,3 millones de euros-- y queremos que se siga el mismo camino en el tema del parqué», señala el edil Serralvo, quien hace hincapié en que se necesita agilizar los trámites y los procedimientos. «Entendemos que las administraciones tienen sus tiempos, pero la sustitución del suelo del pabellón es imprescindible», asevera el concejal vila-realense responsable de las infraestructuras deportivas.
Clausura por seguridad
Hay que recordar que, como consecuencia de los defectos constructivos de la cubierta del edificio, tuvo que cerrarse el mismo en abril del pasado año, es decir, hace algo más de 14 meses. La seguridad de los integrantes que entrenaban en él fue la principal justificación para la clausura del polideportivo. De hecho, durante la reparación del techo y debido a un episodio de importantes lluvias, llegó a derrumbarse parte de la cubierta que todavía restaba por arreglar.
«De nuevo, el hecho de mantener cerrado este recinto obliga al Servei Municipal d’Esports a redistribuir los horarios para el entrenamiento de los clubs de la ciudad, que tienen que repartirse en los cuatro polideportivos municipales», explica Serralvo, quien informa que buscan espacios alternativos, como puede ser alguna nave de dimensiones adecuadas, para suplir las necesidades hasta que esté resuelta la problemática del centro de tecnificación.
Obligaciones de las administraciones
El edil recuerda que es a la Generalitat a quien le corresponde acelerar las gestiones para poder volver a abrir en condiciones el pabellón. «Arreglar este espacio es competencia de la Administración autonómica, que es la propietaria, y desde el Ayuntamiento nos encargamos de su mantenimiento», dice, como consecuencia de la firma de la encomienda de gestión que permitió al consistorio abrir en el 2015 el polideportivo y la piscina cubierta, cuatro años después de que, poco antes de las elecciones del 2011, los responsables de los gobiernos local y del Consell --en aquel momento ambos en manos del PP-- inauguraron el recinto, pese a que no existía un plan de uso.
Una década después de construirse siguen surgiendo defectos que suponen sobrecostes.
