Vila-real tirará de préstamo para pagar otros 1,3 millones en sentencias urbanísticas

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha instado a la concejala de Hacienda, Sabina Escrig, a iniciar un expediente para solicitar un préstamo «que permita hacer frente a un nuevo pago millonario por empastres del urbanismo heredado del Partido Popular».

El Ayuntamiento tiene que abonar 1.345.621 euros en sentencias firmes, «un nuevo mazazo económico que se suma a los 1,4 millones de euros que el consistorio ya ha pagado con recursos propios en este 2023 por la gestión urbanística del PP», afirman, y que ya elevará a cerca de 40 millones la cifra desembolsada desde el 2011 por sentencias y otras contingencias por procedimientos urbanísticos del gobierno del PP.

Escrig asevera que «estamos ante un nuevo ejemplo de la herencia envenenada que dejó el PP, que desgraciadamente consume recursos y esfuerzos del Ayuntamiento y que obliga a estar en permanente alerta para evitar la quiebra de las arcas municipales y garantizar los servicios y el modelo de ciudad que hemos construido en la última década».

Junta de Portavoces

La edila trasladó ayer a la Junta de Portavoces la decisión del alcalde de elevar al próximo pleno municipal el inicio del expediente para contratar este crédito, cuyo destino es afrontar fallos judiciales firmes de reclamaciones de propietarios por proyectos como la apertura de la avenida França, la ronda suroeste o la cesión de suelo viario en la calle Germanies, entre otros.

Un centenar de juicios amenazan a Vila-real por el urbanismo del PP

Incide Escrig en que, tras pagar «a pulmón» casi 1,4 millones por conceptos similares en este ejercicio, «ya no tenemos más margen para afrontar estas nuevas sentencias y no tenemos más remedio que recurrir al endeudamiento».

Por otra parte, la concejala realza que la cantidad pagada desde el 2011 no ha sido mayor de los 40 millones «porque hemos peleado hasta el último euro y negociado con los propietarios cuando ha sido necesario para defender los intereses de la ciudad, una gestión que ha ahorrado al Ayuntamiento más de 35 millones». 

Con todo, Escrig enfatiza que «pese a estos mazazos económicos que supone la herencia de empastres urbanísticos del PP, este equipo de gobierno no va a pedir más esfuerzos a la ciudadanía y, por tanto, no nos planteamos un incremento de la contribución».