Raúl Albiol, capitán del Villarreal, afirmó que el equipo quiere más y que tras haberse clasificado para las semifinales de la Liga de Campeones al eliminar al Bayern la mente está en acceder a la final. Albiol, que con 36 años obtuvo el premio de jugador más valioso del partido, admitió que durante muchos minutos tuvieron que "achicar agua, que habían sufrido mucho y que el resultado y la clasificación les había dejado un sabor de boca "grandísimo".
"Han sido noventa minutos largos y no queríamos la prórroga porque habría sido demasiado sufrimiento ante un rival con delanteros de un nivel muy alto, que nos han obligado a estar muy concentrados, aunque ellos nos han hecho un gol con media ocasión", agregó.
"Es un éxito de un pueblo, un club, una directiva, un equipo y de todo el fútbol español. Ha sido muy bonito y ha demostrado, como ya hicimos el año pasado en la Liga Europa que competimos muy bien. El trabajo y la pasión son fundamentales", concluyó.
“Una clasificación merecida”
Por su parte, Gerard Moreno, delantero del Villarreal, afirmó tras la clasificación de su equipo para las semifinales de la Liga de Campeones, que desde que salió el Bayern en el sorteo estaban convencidos de que podían superarle y que en el conjunto de la eliminatoria se han merecido el pase.
"En casa jugamos muy bien, pero no les matamos a pesar de jugar muy bien y hoy nos han dejado salir vivos y lo hemos aprovechado ante uno de los mejores equipos del mundo", agregó en declaraciones a Movistar+, al igual que Albiol.
"La fe y la creencia mueven montañas y lo conseguido hoy es muy grande porque llevamos años compitiendo a muy buen nivel y ahora quedan unas semifinales en las que tendremos que respetar al equipo que nos toque", indicó.
Respecto al desarrollo del partido, señaló que eran conscientes de que el rival iba a tener sus momentos, pero que también el Villarreal los iba a tener y prueba de ello fue el gol de Samu Chukwueze a dos minutos del noventa.
