VILLARREAL CF

El Villarreal pone su punto de mira en un delantero argentino para su próximo proyecto

El club amarillo sigue analizando el mercado para reforzar el plantel con fichajes 'low cost'

En las oficinas de la Ciudad Deportiva josé Manuel Llaneza se sigue planificando el futuro proyecto. El Villarreal CF quiere llegar a la pretemporada con un alto porcentaje de su plantilla cerrada, aunque el mercado del fútbol siempre depara sorpresas en el tramo final. Pero serían solamente eso, vaivenes de última hora.

Con tres incorporaciones ya realizadas, tras la rúbrica de compromisos con jugadores que son agentes libres al terminar Denis Suárez, Brereton Díaz y Santi Comesaña sus contratos con sus respectivos clubs, la oferta de renovación a Raúl Albiol todavía no firmada por el central, y también la propuesta de ampliación de contrato de Dani Parejo encima de la mesa del centrocampista hasta 2026, el club sigue observando y analizando posibles opciones para potenciar su plantilla. El objetivo es reducir la masa salarial y adaptarla a la realidad económica, pero manteniendo el nivel competitivo.

El club lo tiene como un probable objetivo para el ataque

Entre las posibilidades que baraja el club amarillo, se encuentra el delantero del Elche Lucas Boyé. El ariete argentino concluye su compromiso con el conjunto ilicitano en junio de 2024, lo que unido al inminente descenso a Segunda, convertirían al jugador en una buena oportunidad de mercado. Boyé es un delantero de un perfil diferente a los que tiene en nómina el Villarreal. Tiene un buen dominio del juego aéreo, se mueve bien de espaldas a la portería y aporta mucho trabajo al equipo, además de estar bien dotado técnicamente. No destaca por ser un goleador con cifras importantes, pero es una buena alternativa en ataque que ofrece cualidades diferentes a las de sus compañeros.

El Sevilla quiso firmar a Boyé en verano

El Sevilla ya intentó su contratación en el mercado de verano de 2022, pero su oferta de diez millones de euros más un bonus de tres en variables, no fue aceptada. Boyé tiene una cláusula de rescisión de 25 millones, muy por encima de la actualidad del mercado y de la cotización actual de un jugador con muy buenas cualidades, pero que no ha tenido un gran año, condicionado por la mala trayectoria de los ilicitanos que les ha llevado a un descenso no consumado matemáticamente pero al que están condenados.

El Villarreal tiene a Boyé como una de las alternativas para reforzar el ataque, en previsión de posibles traspasos de jugadores de la actual plantilla. Los casos de Nico Jackson y Samu Chukwueze, ambos con posibilidades de salir traspasado en la próxima ventana de fichajes, obligaría a buscar refuerzos para el ataque. 

La opción del delantero argentino del Elche se ajustaría a las posibilidades económicas del Villarreal, con un precio que podría oscilar entre los 5 y 8 millones de euros. Incluso, con la posibilidad de incluir algún jugador del filial en la operación o cesiones. La dirección deportiva sigue planificando el próximo proyecto, aprovechando con antelación las buenas ocasiones que ofrece el mercado y adelantándose a los competidores. A quien madruga, dios le ayuda.