La Línea 1 del TRAM, que une el Grao con la UJI, con su papel vertebrador entre centro y distrito marítimo, es una realidad desde ayer en Castellón, en una jornada en la que las colas fueron incesantes durante toda la mañana, animadas por la gratuidad del servicio en su primer día.

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, estrenó también el recorrido, junto con el alcalde de la ciudad, Alfonso Bataller, el presidente de la Diputación, Javier Moliner, y el embajador de Polonia en España, Tomasz Arabski.

Fabra destacó la importancia de la entrada en funcionamiento de un sistema de movilidad que espera atraer a 2,5 millones de pasajeros cada año, y que tachó de “pionero en España”, así como “moderno y sostenible”. Añadió que en toda Europa, “solo lo tienen dos ciudades, Roma y Londres”, por lo que, dijo, “Castellón podrá compararse” con ambas.

El líder del Consell, quien tomó el TRAM en su parada de salida en el Grao y viajó en un vehículo atestado hasta la puerta del Sol, hizo hincapié en la idea de que la infraestructura ha contribuido a la remodelación de la ciudad, de modo que “hemos ganado espacio para los ciudadanos”.

En este sentido, destacó la transformación del centro histórico, así como del eje de conexión al Grao, “convertido ahora en un auténtico bulevar urbano”, dijo.

Alberto Fabra aseveró que el TRAM, el AVE que unirá Castellón con Madrid y la entrada en funcionamiento del aeropuerto “son tres infraestructuras estratégicas históricas para la provincia y la Comunitat que transformarán Castellón en el 2015 “.

En relación con el proyecto de la Línea 2 del TRAM, concebido para conectar municipios del área metropolitana como Benicàssim, Almassora y Vila-real, entre otros, con la capital, el líder del Consell indicó que “la hoja de ruta está marcada”, y avanzó que “el programa siguiente tiene que ser avanzar para que esa conexión comarcal sea también una realidad”. Sin embargo, no concretó, sino que señaló que llegará “a su tiempo”.

En cuanto al alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, el primer edil de la ciudad destacó que “con el TRAM, ha llegado a nuestras calles un nuevo vecino; un sistema de transporte que ya cuenta con alrededor de cinco millones de usuarios, y estamos convencidos de que pronto serán muchos más los que se sumen”.

Bataller mostró su satisfacción y quiso recordar “la paciencia de los comercios durante las obras y la confianza de todos los vecinos de la ciudad, que son los que verdaderamente han hecho posible que este proyecto sea hoy una realidad en nuestras calles”.

Por otra parte, una protesta encabezada por Carmen Carreras y Víctor Tormo, de EU, criticó el alto coste del servicio --100 millones de euros-- y su trazado. H