El centro de vacunación masiva de Castelló ha cerrado ya sus puertas en el Auditori y ahora los trabajos se centran en el desmontaje de esta instalación en la que se han inoculado más de 189.000 dosis desde el pasado 19 de abril. Un equipo de más de 60 personas formado por personal sanitario de Enfermería, Técnicos Auxiliares de Cuidados en Enfermería, personal celador, personal de gestión y servicios, personal administrativo y personal del Servicio de Emergencias Sanitarias han garantizado su funcionamiento.
La operatividad del espacio ha estado en manos del personal del Auditori de Castelló y de Tragsa, mientras que la gestión, reparto y coordinación de dosis y vacunas ha estado a cargo del Centro de Salud Pública de Castellón. El punto de vacunación ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Castelló, Bomberos municipales, Protección Civil y Cruz Roja.
La actividad se ha desarrollado ininterrumpidamente durante 24 semanas, siendo la de mayor actividad la del 23 al 27 de agosto, con más de 22.000 personas con cita previa. En estos meses, los servicios de emergencias sanitarias han asistido a 460 personas, principalmente por ansiedad, mareos o algún tipo de reacción alérgica.
Sin duda, este espacio ha sido el más grande de los habilitados en toda la provincia para administrar la vacuna contra el coronavirus. Los vacunódromos de Benicàssim, Vila-real, Burriana, Almassora o la Vall d'Uixó ya han cerrado tras haber pasado por estas instalaciones miles de personas de todas las edades y que han recibido más 460.000 dosis de las cuatro vacunas que se han inyectado en la Comunitat valenciana: AstraZeneca, Janssen, Pfizer y Moderna. Ahora la vacunación contra el coronavirus se traslada a los centros de salud.
