TURISMO

Las playas de Castellón viven su sábado de gloria gracias al buen tiempo

Tanto la costa como el interior viven una actividad propia de los años anteriores al covid

Aspecto de la playa Norte de Peñíscola, el Sábado de Gloria del 2022.

Aspecto de la playa Norte de Peñíscola, el Sábado de Gloria del 2022. / Alba Boix

Bartomeu Roig

Bartomeu Roig

Todos los empresarios dedicados al turismo en Castellón miran al cielo (y a las previsiones meteorológicas) de forma compulsiva en los días previos en Semana Santa. Y más en este caso, cuando se enfrentaban a un año de relativa normalidad tras dos ediciones frustradas por la pandemia. Las fuertes lluvias que recorrieron la provincia de norte a sur el miércoles dieron paso a un tiempo más que primaveral, con un Sábado de Gloria marcado por las altas temperaturas, con máximas de 25 grados en la costa y un ambiente agradable, que hizo llenar no solo las terrazas y los paseos, sino también las playas.

Es el caso de Peñíscola, que presentó una elevada ocupación por parte de quienes quisieron tomar la primera ración de rayos de sol de la temporada, aunque escenas similares se vieron en el resto de destinos de la provincia, como Orpesa, Benicàssim o Alcossebre. Muchas familias y grupos de amigos se congregaron en la playa, si bien fueron muy pocos los que optaron por bañarse, ya que las temperaturas del agua siguen siendo muy frescas.

Movimiento en las calles y negocios de hostelería de Morella.

Movimiento en las calles y negocios de hostelería de Morella. / Javier Ortí

Tal y como habían vaticinado las principales agrupaciones turísticas de Castellón, tanto el viernes como el sábado las ocupaciones alcanzaron cifras de más del 80% en los alojamientos, con el cartel de completo en algunos casos, especialmente en el interior. Las buenas previsiones del tiempo animaron las reservas de última hora, así como el desplazamiento masivo de aquellos que tienen segundas residencias en la provincia.

Hostelería

Una consecuencia de este ímpetu con el que el turismo se ha tomado la primera Semana Santa sin apenas restricciones fue la elevada presencia de clientes en negocios de hostelería. En esta ocasión, las ganas de recuperar la normalidad y las tradiciones en estas fechas han podido más que la incertidumbre causada por la elevada inflación y los posibles efectos económicos de la guerra en Ucrania.

Aún así, empresarios señalan que el gasto medio por consumidor ha bajado, mientras que están a la expectativa de conocer la evolución de las próximas semanas. Un informe del observatorio Cetelem calculó que los castellonenses se acabarán gastando en estos días unos 366 euros, lo que supone un 7% más que en el 2019. Un incremento que se debe, en gran medida, al incremento del coste de la vida, que según el IPC se sitúa en el 9,8% interanual en los últimos 12 meses.

Próxima semana

Los avances de previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) indican que en los próximos días seguirá el tiempo primaveral, aunque con la posibilidad de algunos chubascos puntuales. Ya el día de Pascua se esperan unos termómetros ligeramente a la baja, con máximas que no pasarán de los 22 grados.

Las previsiones para los próximos días en varios puntos de la provincia:

Castelló


Morella


Peñíscola


Segorbe


Vinaròs


La Vall d'Uixó


Alcalà de Xivert


Onda


Vall d'Alba

Desde las patronales Ashotur y Hosbec se señaló que las perspectivas para el Lunes de Pascua y el resto de la semana próxima son esperanzadoras, con ocupaciones hoteleras de más del 50%, gracias a las vacaciones escolares en la Comunitat Valenciana.