El proyecto Castor sigue alzando dudas. Los expertos que ayer participaron en la mesa redonda que organizó la Universitat de Barcelona para analizar las características geológicas de su entorno y qué ha provocado los más de 700 minisismos que se han producido se preguntaron ayer si la instalación es totalmente estanca como para almacenar gas.

La pregunta la lanzó el antiguo trabajador de Union Texas Albert Martínez, que estaba entre el público, al señalar que el antiguo yacimiento albergaba petróleo pero no gas, por lo que este podría haberse filtrado por las rocas. En este caso, ahora no serviría para almacenarlo. Incluso señaló que este gas, al filtrarse, podría haber provocado los miniterremotos.

Sobre esto, el profesor del departamento de Estratigrafía, Paleontología i Geociencias Marinas de la UB Mariano Marzo señaló que no hay estudios conocidos que indiquen que es así, aunque, dijo, el proyecto ha tenido estudios suficientes como para que este aspecto se haya comprobado.

Marzo y su compañera del Departamento de Geodinámica i Geofísica Eulàlia Masana destacaron la ausencia de información sobre las fallas de la zona. Asimismo, Masana avisó de que si se produjese “una gran rotura, es posible que hubiese un tsunami”. “Se tiene que estudiar”, dijo, “pero podemos estar bastante tranquilos porque no hay mucha lámina de agua” entre la plataforma y tierra (22 kilómetros). A priori, la ola no sería muy grande. H