La ministra de Fomento, Ana Pastor, volvió ayer a achacar el retraso en las obras del corredor mediterráneo a la solicitud de las empresas de mantener el ancho ibérico en su trazado --como ya hizo Adif hace 10 días, al señalar que las obras se adecuan a “las necesidades” de las firmas--, algo que ya han negado los operadores ferroviarios, al indicar que “hasta que no haya una fecha y un diseño claro es imposible tener trenes”, como publicó ayer Mediterráneo.

En Antena 3, Pastor incluso llegó a afirmar que “se está construyendo el Corredor desde Castellbisbal (Barcelona) hacia abajo”, cuando en el tramo de Castellón a Vandellós (Tarragona) las obras no han empezado, más allá de la preparación del tramo del apeadero de les Palmes a Benicàssim, donde se está retirando hormigón de las vías, como también recogió este mismo diario.

En televisión, Pastor destacó que hasta más de seis empresarios les “han mandado una carta” solicitando al Ministerio que deje el ancho ibérico y “lo que ha hecho el Gobierno es escuchar” a las compañías. Incluso cita “la conexión con Sagunto” como una de las zonas en que se ha mantenido el ancho ibérico, cuando el proyecto de Fomento lo incluyó desde el primer momento (incluso hasta Castellón, pero no desde aquí a Tarragona, la zona en que las obras van más retrasadas).

Además, Pastor destacó que “si fuera por presupuesto, todo [el Corredor] podría estar el año que viene”. Pero, aunque afirmó que la conexión “Valencia-Cataluña es la prioridad” para el Gobierno, no pudo dar una fecha para concluir las obras y señaló que depende “de lo que nos digan los técnicos” y “en el momento en que tenga una fecha cerrada”, la podrá decir. Eso sí, deseó “que no haya problemas técnicos”.

En la entrevista, Pastor citó seis ciudades que el año que viene tendrán AVE o reducirán sus tiempos de viaje a Madrid (Granada, León, Zamora, Murcia, Santander y Salamanca), pero no citó a Castellón. Eso sí, dijo que en el 2018 llegará el AVE a Galicia. H