La alcaldesa envía una carta a la madre de las niñas: «Pido perdón, les hemos fallado»

Marco, que compareció ayer vestida de oscuro y visiblemente triste, explicó que estaba «muy afectada». «Supongo que como todo el mundo». «Cuando te enteras de que hay una persona de 48 años que ha matado a sus dos hijas y estás vistiendo a las tuyas y te das cuenta de lo que eso supone, como madre, como mujer, como persona, me afectó muchísimo». «Como alcaldesa me siento culpable de lo que ha pasado en la ciudad», señaló Marco. «Me hubiera gustado que nunca en Castellón hubiera pasado un acto de terrorismo como el que vivimos», declaró muy compungida.

«Algo pasa cuando esto ocurre. Y todos somos culpables, yo la primera, porque nadie lo detectamos. La familia, los amigos, en el colegio, no lo detectamos, no pudimos preverlo». «Y si no lo podemos prever, estamos fallando», lamentó la primera edila.

Marco confesó que «cuando escribía la carta no paraba de llorar». «No hay palabras para una madre y ojalá no tengamos que volver a vivir esto. Hay que ponerse las pilas las administraciones, porque aquí pasa algo y es desde abajo, desde la educación donde hay que actuar a fondo», dijo.

Y, envió «un abrazo y un beso muy fuerte en nombre de la corporación» y del suyo propio «a Itziar y que sepa que aquí tiene 27 hombros, manos, corazones y personas para apoyarla en este caso». En el pleno, celebrado ayer, la corporación municipal guardó un minuto de silencio en recuerdo sentido de las víctimas.

Muchos concejales mostraron su dolor por lo ocurrido. Begoña Carrasco manifestó que «Castellón está de luto. Siempre en nuestros corazones... descansen en paz dos angelitos inocentes». Para Antonio Lorenzo, el asesino «las ha matado para que Itziar no vuelva a ver las miradas, a oír las risas, a sentir las caricias de sus niñas. Para dejar en negro la vida de su madre». E Ignasi Garcia confesó que no tiene «palabras para expresar las condolencias a la familia», ni para enfrentarse al «terrorismo machista».