Entre tantos episodios vergonzantes de nuestra historia reciente, la aprobación de esta ley en el Parlamento vasco con los votos de PNV y Partido Socialista es uno de los peores. El tipo de Bildu llamando terroristas y nazis a la policía es el mundo al revés. Es el reflejo de que el problema independentista está mal cerrado, a base de todo concesiones y no de aplicación estricta de la ley. Pero contra más les des, más quieren y el límite será la ruina de todos. Esta hoja de ruta que trazó Zapatero, la siguió Rajoy y ahora Sánchez la eleva al despropósito supino. La Policía y la Guardia Civil se merecen el respeto de todos, tras cientos de miembros asesinados por esos miserables etarras y, por supuesto, una equiparación salarial prometida pero nunca cumplida. El PNV siempre ha negociado lo que más le interesa, se caracteriza por su falta de palabra. Pero el PSOE, comprando votos a cambio de la ignomia y la vergüenza, ¿ha olvidado sus 11 muertos? Es increíble. Y las víctimas del terrorismo merecen un mínimo de respeto. Se está intentando blanquear la historia y hacer ver que hubo un conflicto entre iguales y no es así, había verdugos y víctimas, había terroristas asesinos contra un Estado de derecho, cuyos dirigentes no han sido lo firmes que habrían debido. La ley de los partidos políticos sigue vigente y los que están a favor de la violencia pueden ser ilegalizados. En realidad solo persiguen beneficios económicos para todos aquellos que «aleguen» abuso policial que determinará una «comisión» sin sentencia ni juicio. Dinero que como imbéciles pagaremos todos.

*Notario