Rescates, calles desaparecidas, caminos cortados, un paseo marítimo destrozado y coches que flotaban en el agua. Imagen dantesca la que presentaba ayer la playa de Almassora, donde el temporal descargó con fuerza durante la madrugada y dejó unas precipitaciones acumuladas de más de 150 l/m² en 24 horas, según AEMET (el registro más alto desde la instalación del pluviómetro, superando los 141 l/m² del año 1989).

Un amplio despliegue de bomberos, Policía Local, Guardia Civil y operarios municipales actuaron en la zona, totalmente colapsada. Ocho dotaciones del Consorcio Provincial se emplearon a fondo para auxiliar a más de 40 personas que habían quedado atrapadas en sus casas ante las inundaciones. Muchas de ellas eran vecinos de avanzada edad o con movilidad reducida, indicaron fuentes del dispositivo habilitado a este diario. Los bomberos emplearon botes y camiones todoterreno para transportar a los afectados y ponerlos a salvo. Pese al susto por lo ocurrido, todos se encontraban en buen estado.

«Nunca antes habíamos visto unas inundaciones de esta magnitud en Almassora. Nos ha tocado salir por la ventana del vehículo», explicaron integrantes del dispositivo a este rotativo.

La unidad de maquinaria y logística también colaboró con los medios municipales para achicar el agua acumulada en las calles de la playa e intentar devolver así la normalidad a la zona.

El Ayuntamiento ofreció traslado y alojamiento al vecindario afectado por las anegaciones y cuya residencia habitual se encuentra en la playa. La línea de autobús urbano no funcionó como transporte ordinario, sino para reubicar a los residentes.

La alcaldesa, Merche Galí, anunció que quienes necesiten ayuda «pueden contactar con el número de teléfono 964 560 007 y el consistorio facilitará su realojo temporal hasta que la playa recupere la normalidad, como ocurrió en enero con los efectos de la borrasca Gloria», concretó.

trabajos MUNICIPALES / Respecto a las actuaciones realizadas, el equipo de gobierno incidió ayer en que los cinco colectores de bombeo de agua en la zona centro de la playa y los tres ubicados en la zona norte «trabajan para expulsar hacia el mar el agua recogida». Asimismo, destacaron que dos excavadoras rompieron el muro que separa la el paseo marítimo de la zona de playa para facilitar la extracción.

Los vecinos hablaban de falta de previsión. Incidían en que en los canales de desagüe que van hasta les Goles había tierra y materiales desde la borrasca Gloria y criticaban que no se hubiesen limpiado a tiempo. El Ayuntamiento negó este extremo y aseguró que las brigadas y los efectivos de los planes de ocupación acondicionaron los canales después del paso de Gloria.