Los vecinos afectados por el pozo cerrado en Castelló urgen clorar ya el agua

Los vecinos afectados por el corte de suministro del agua del pozo Peña Rocha de Castelló por «contaminación microbiológica» se reunieron ayer para reclamar una solución urgente que permita retomar el abastecimiento de agua potable a alrededor de 4.000 residentes de las urbanizaciones de montaña Penyeta Roja, Tossal Gros y Racó de la Torreta, además del camí El Collet. A la cita no acudieron responsables de la sociedad civil gestora de la instalación privada, «por lo que no hemos podido resolver muchas dudas», señalaron varios vecinos asistentes.

 En el encuentro, encabezado por los presidentes de las asociaciones de vecinos de esta zona de la capital, estuvo un vecino experto en la materia que explicó los motivos que habían llevado a la Conselleria de Sanitat a clausurar el pozo y abordó las posibles soluciones, como la cloración del agua. Esta infraestructura cuenta con 380 tomas conectadas, 350 de ellas de viviendas, por tanto, su principal uso es para consumo humano y no para el riego, actividad para la cual fue ideado.

Así, se puso encima de la mesa el problema de bacterias aparecido, que imposibilita la salubridad, pero que podría resolverse mediante la cloración. De igual modo, los niveles de nitratos son elevados, lo que se mitigaría colocando mecanismos de ósmosis, con los que ya cuentan algunos domicilios de esta zona.

4.000 vecinos de Castelló, sin agua potable por la contaminación de un pozo

Sanitat da un mes de plazo para resolver el problema de contaminación

«Sanitat ha dado un mes a la empresa gestora para resolver la situación y desde la junta han asegurado que están mirando presupuestos para clorar, pero nosotros queremos una respuesta inmediata porque esto es un verdadero problema», señala uno de los afectados. Así para mitigar la falta de suministro los vecinos están optando por hervir el agua, comprar garrafas y algunos que residen allí como segunda vivienda han decidido dejar las urbanizaciones. 

«No puede ser que no se lleve un control sobre la calidad del agua correcto. El pozo no está dentro de la Confederación Hidrográfica del Júcar, lo que nos permitiría controlar los análisis que se realizan, pero desde la junta aseguran que se ha solicitado, pero eso es una cuestión que tarda en resolverse», han señalado.

«Este lunes los responsables de las asociaciones trasladarán una carta al presidente de la junta gestora para que se comprometa a clorar el agua de forma urgente», después de que la Conselleria haya informado de que no es apta para beber, cocinar, preparar alimentos e higiene personal.

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