Sergi Escobar se marchó fuera de España en busca de experiencia y reconocimiento. Tras su primera etapa en el CD Castellón, y un paso intermedio en el CD Soneja, el técnico de Almassora apostó por viajar a Colombia y se enroló en las filas del América de Cali. Durante su estancia en Sudamérica, Escobar creció profesionalmente como segundo entrenador de Juan Cruz y juntos hicieron campeón al equipo. Era la mano derecha del técnico titular y con él trabajó con insistencia uno de los aspectos que ahora le están dando éxito también en las filas del conjunto orellut: el juego defensivo.
Ese mismo planteamiento lo siguió también en su periplo en el Sibenik croata (al que salvó del descenso) y ahora lo está poniendo en práctica desde el banquillo del cuadro albinegro, sobre todo, en esta temporada en la Primera RFEF. Escobar, que se incorporó el curso pasado al equipo cuando ya tenía pie y medio en la entonces llamada Segunda B, lleva trabajando de forma individual y grupal con los defensas y centrocampistas del primer equipo, a los que alecciona no solo con palabras y planteamientos tácticos sino también con vídeos en sesiones en la sala de prensa de Castalia.
Sesiones de vídeo
Él mismo lo desveló a la conclusión del encuentro del pasado domingo ante el Atlético Baleares cuando explicó que una de las claves para haber podido doblegar al equipo de Palma de Mallorca había sido «la defensa de los centros laterales al área». «Nosotros trabajamos mucho las áreas porque es ahí donde se deciden los partidos. Yo soy un obsesionado en la defensa de los centros laterales al área, por eso reuní la semana pasada a los defensas y los centrocampistas porque, aún habiendo ganado en San Fernando, consideraba que no habíamos defendido de la manera excelente que yo quería», comentó el propio entrenador.
Está claro que los hechos están dando la razón al entrenador de Almassora, que ha logrado pulir los errores que se habían cometido en el arranque liguero y ha conseguido que su equipo haya encajado tan solo tres goles en los últimos cinco compromisos de liga, dando solidez a su zaga y también consiguiendo que todo el equipo se reparta el juego tanto ofensivo como defensivo en los momentos en que se hace necesario durante los partidos.
