La coordinación de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado con la Policía Local y la Guardia Rural ha propiciado un descenso del 52,5% de los robos en las instalaciones agrícolas y ganaderas de la provincia en el primer semestre del año. Así se puso de manifiesto ayer en la reunión de seguridad agraria de la Plana Baixa y la Plana Alta celebrada en Almenara y presidida por el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues; el coronel jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Castellón, Miguel Fresneda; y la alcaldesa, Estíbaliz Pérez.

En el encuentro también estuvieron alcaldes y concejales de numerosas localidades de ambas comarcas, así como mandos de la Benemérita, representantes de la Policía Local y de las asociaciones agrarias. Y es que la campaña de recolección de cítricos que acaba de empezar se prevé problemática dada la reducida cosecha, lo que puede propiciar la subida de precios y que el fruto se convierta en atractivo para los ladrones.

Moragues destacó que Castellón está a la cabeza de la reducción de los delitos en el campo pero no hay que bajar la guardia. Por ello, desde la Subdelegación del Gobierno destacaron la necesidad de que la Generalitat impulse la numeración de las parcelas para que sean controladas con los documentos Data. Estos sirven de control de trazabilidad de la fruta y para evitar robos.