Almassora inicia las obras del centro social de Fátima por 270.000 euros

Una empresa local ejecutará los trabajos durante medio año

La empresa local Actividades Constructivas Noel S.L.U. ha iniciado este lunes las obras del centro social de Fátima de Almassora.

La empresa local Actividades Constructivas Noel S.L.U. ha iniciado este lunes las obras del centro social de Fátima de Almassora. / MEDITERRÁNEO

R. D. M.

La empresa local Actividades Constructivas Noel S.L.U. ha iniciado este lunes las obras del centro social de Fátima por 270.616,58 euros, trabajos cofinanciados por el Ayuntamiento de Almassora y los fondos FEDER de la Unión Europea.

El bajo de la calle San Pablo se amplía hasta alcanzar los 259 metros cuadrados para albergar actividades continuadas y ofrecer más comodidad a las decenas de vecinos que cada día se reúnen en este espacio.

El arquitecto local José Manuel Martinavarro es el encargado de un diseño que prima la luz natural con ventanales y que abrirá un nuevo acceso a la plaza Virgen de Fátima, tal como mostró el equipo de gobierno al vecindario en la reunión celebrada a finales de marzo.

Traslado de las clases

En estos momentos, el material y las clases que habitualmente tienen lugar en este espacio se han trasladado temporalmente a otros centros municipales para dejar paso a la maquinaria que, desde esta mañana, ha comenzado a operar en el entorno.

El vallado de seguridad en la fachada de la calle San Pablo impide el acceso al personal ajeno a una obra que se extenderá durante seis meses, uno menos de lo previsto en el pliego de condiciones. En ese punto se alzan los andamios que permitirán el acceso superior al recinto, que renovará por completo su imagen interior y exterior.

De hecho, conectará con la plaza para atraer a más vecindario y sumará nuevos departamentos en el espacio diáfano interior a través de un panel móvil que permitirá realizar actividades diferentes de forma simultánea. El Ayuntamiento aprovechará la intervención para renovar las canalizaciones de agua y renovar el sistema eléctrico.

Todo ello coincidirá con una nueva distribución de los aseos, así como con la sustitución del techo para garantizar su impermeabilización.

No obstante, entre las prioridades de las obras figura la eliminación de todas las barreras arquitectónicas para garantizar el acceso de la totalidad del vecindario. De hecho, buena parte de los usuarios son personas de edad avanzada que, tras la reforma, no tendrán problemas para entrar, salir y desplazarse por el centro social con sillas de ruedas o andadores.