El ‘empedrao’ de la Vall cambia de horario pero no de buen ambiente

Cuando una comisión elabora un programa de fiestas sabe que hay actos que son garantía de éxito y entre ellos, en la Vall d’Uixó, no puede faltar una cita con la gastronomía local. Un año más, el empedrao popular de las fiestas patronales de la Sagrada Familia y el Santísimo Cristo ha corroborado el acierto de apostar por las tradiciones y, si bien ha habido un cambio de horario, este no ha afectado lo más mínimo ni al buen ambiente ni a la participación, más bien al contrario.

Mientras el cocinero se encargaba de ultimar la preparación de la receta vallera por excelencia, además de dos grandes paellas, los miembros de la comisión velaban para que los prácticamente 1.500 asistentes solo tuvieron que preocuparse de tomar asiento.

Implicación de la comisión

Ese es uno de los valores que se les puede atribuir y agradecer a los integrantes de la comisión de fiestas que preside Juanma Sánchez Bonifás, su implicación para que todo fluya y que la gente solo tenga que disfrutar del programa propuesto. Si hacían falta mesas, de inmediato las colocaron, distribuyeron las mesas y las dotaron de lo necesario para acompañar al plato de empedrao que, de buen seguro, más de uno agradeció comer a mediodía y no por la noche, que quienes lo conocen ya saben que este un plato tan suculento como contundente.

Peñas, familias, grupos de amigos, políticos de distintos signos políticos y como invitados especiales, representantes de la Gaiata Cor de la Ciutat de Castelló. A las patronales les queda un suspiro, el que se dará hoy con el cierre del programa taurino, que contempla la exhibición matinal de dos cerriles, de las ganaderías de Lagunajanda y Luis Algarra, patrocinados por las peñas 8 del 8 y El Búnkier respectivamente.