La crónica del terremoto político que ha sacudido Vinaròs: una moción de censura con cambio de alcalde a la vista

Terremoto político en Vinaròs con cambio de alcalde a la vista. Partido Popular, Partit Vinaròs Independent (PVI) y Vox han unido fuerzas para arrebatar la vara de mando a Guillem Alsina (PSPV) y cambiar el de signo el gobierno local de socialistas y Compromís.

Durante la mañana de este jueves, los tres grupos presentaron una moción de censura que se llevará a pleno el 29 de diciembre, como confirmó el propio Ayuntamiento. Con los nueve ediles populares y los dos que tienen tanto PVI como Vox, la propuesta saldría adelante, frente a los 10 que suman PSPV y Compromís. También dieron a conocer que la nueva alcaldesa será la concejala independiente María Dolores Miralles.

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Comunicados dispares

La noticia corrió como la pólvora en la capital del Baix Maestrat. Nada más conocerse, el ejecutivo convocó a los medios para dar su versión. En el impasse, se sucedieron varios comunicados. Uno escueto de los populares, en el que se apuntaba a la falta de presupuesto este año y las dificultades para aprobar el del 2024 como uno de los ejes de la moción de censura. Y otro texto más polémico por parte de Vox, ya que remarcaban que entre las medidas del acuerdo para desbancar a la izquierda estarían recuperar el topónimo castellano de Vinaròs (Vinaroz), eliminar la concejalía de Igualdad, preservar las señas de identidad, garantizar el libre uso del español o fomentar las fiestas religiosas, la tauromaquia o los bous al carrer, entre otras acciones.

Una hora más tarde de enviarlo, la formación de ultraderecha reculó y lo cambiaron por el mismo que el PP, pero manteniendo el topónimo no oficial Vinaroz. Los tres partidos de la oposición se ciñeron a este comunicado y no hicieron ninguna otra valoración. 

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Y llegó la comparecencia del todavía alcalde, Guillem Alsina. Empezó su alocución, escudado por el resto de concejales del gobierno, asegurando que «es un día muy triste para Vinaròs».

Sus principales dardos fueron para el PVI. Les acusó de hacerles perder el tiempo en las negociaciones de un presupuesto 2024, cuyo borrador, según el socialista, se presentó al PVI «hasta 24 veces». «Parecía que tras el desagradable episodio del pleno de investidura, el PVI había entrado en razón y estaba dispuesto a trabajar con el ejecutivo para mantener la viabilidad del consistorio». 

Las conversaciones, explicó Alsina, se iniciaron el 25 de septiembre. «Hubo varias reuniones desde ese día y, en noviembre, le trasladamos a Miralles la octava versión del borrador del presupuesto. Los contactos continuaron, pero con excusas y demoras por parte de la portavoz del PVI, que ahora sabemos que era para dilatarlo en el tiempo. Pero seguimos trabajando hasta llegar a la versión 24 del presupuesto, la última que les presentamos a las concejalas del PVI, y todo parecía que íbamos a llegar a un acuerdo. Pero esta mañana (ayer para el lector) hemos tenido la sorpresa de la presentación de la moción de censura también firmada por las edilas del PVI». 

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Consenso "casi total"

Según Alsina, el consenso era «prácticamente total», hasta que el PVI «puso como excusa que querían eliminar la plaza de vicesecretario». Pidieron a la Secretaría un informe técnico para valorar esta posibilidad, «que dice que el servicio justifica plenamente este puesto».  

El primer edil desveló que llevarán a votación el nuevo presupuesto, que suma 41,5 millones, en el pleno del 21 de diciembre. «Queremos que sea debatido para ver qué argumenta el PVI», indicó. 

El alcalde concluyó reprochando que «el tripartito PP, PVI y Vox será el de la vergüenza». «El PVI negó por activa y por pasiva que formaría un gobierno con Vox. Quiero pensar que la ejecutiva del PVI ha sido engañada. Cobardemente, han esperado a las fechas navideñas, cuando la gente está pensando en otras cosas. Es una traición a la ciudadanía de Vinaròs», dijo.

En el seno del PVI surgieron las primeras dudas y discrepancias, ya que como ellos mismos señalaron hace unos días, con relación a una moción de Vox a la que se abstuvieron sobre la Ley de Amnistía, «nuestro electorado es un microcosmos de ideologías, que van desde la derecha hasta la izquierda, incluyendo independentistas y no independentistas». 

Por otra parte, PSPV (a nivel autonómico y provincial) y Compromís (provincial y local) condenaron la moción de censura.