En las alineaciones de Juan Carlos Garrido hay una serie de futbolistas que siempre están presentes y que se han convertido en imprescindibles para el entrenador valenciano en el CD Castellón. Son los que forman el escuadrón albinegro con el que el equipo trata de eludir el descenso de categoría y, aunque en sus filas hay muchos futbolistas de la pasada temporada, uno de ellos sobresale entre todos por su rendimiento y su calidad.

Se trata de Yann Bodiger (Sète, Francia, 9 de febrero de 1995), quien se incorporó a la disciplina albinegra el pasado mercado de invierno y se ha convertido en el mejor refuerzo del equipo. El centrocampista francés, que rescindió su contrato con el Cádiz CF para enrolarse en las filas del Castellón, ha demostrado desde el primer día ser ese cerebro en el centro del campo que tanta falta le hacía al plantel de la capital de la Plana ante la baja de Carles Salvador, que se alargó en el tiempo más de lo previsto.

El futbolista galo llegó a Castelló en un buen estado de forma ya que, aunque no estaba disponiendo de demasiados minutos en el conjunto gaditano, sí entrenaba como uno más a las órdenes de Álvaro Cervera. Y esa quizás haya sido una de las claves para su rápida adaptación a diferencia de otros de los fichajes del mercado invernal, que firmaron tras muchos meses sin competir y sin entrenar al ritmo que un equipo de Segunda División requiere.

Fichaje y debut

Así, no es de extrañar que desde su llegada al Castellón el pasado 1 de febrero, Bodiger haya participado en las doce jornadas que se han disputado hasta la fecha, siendo incluso titular en el encuentro contra el Mirandés del pasado 7 de febrero, cuando no hacía ni una sola semana que había empezado a trabajar a las órdenes de Garrido y junto a sus nuevos compañeros. Aquel no fue el debut soñado ya que el equipo perdió (0-1), pero el centrocampista ya dejó pinceladas del gran jugador que es.

Bodiger ha tenido minutos en doce encuentros y suma once titularidades, para un total de 997 minutos. Ha marcado un gol, el de la derrota ante el Fuenlabrada (1-2), y dio la asistencia del 0-1 en el Carlos Belmonte ante el Albacete a Jorge Fernández.

Un ‘todocampista’

Pero, más allá de sus números, lo que destaca de Bodiger es la clase que demuestra con el balón en los pies, su capacidad para leer los encuentros y su polivalencia. El exjugador del Cádiz y del Toulouse, que también vistió la elástica del Córdoba, no solo se suma al ataque cada vez que ve la oportunidad de hacerlo sino que contribuye en labores defensivas como si de un central se tratara ahora que Garrido ha imprimido ese sello en el Castellón. 

Bien se podría decir que Bodiger es un todocampista, que se adapta a las necesidades y abarca todo el campo cuando su equipo así lo requiere. Es un fijo en el Castellón y, junto a Josep Señé, ha formado una buena dupla en el centro del campo, permitiendo el catalán jugar con algo más de libertad que antaño. Eso sí, el principal perjudicado con la llegada del medio francés al equipo ha sido Carles Salvador quien, antes de caer lesionado a finales del año pasado, lo había jugado todo.

No obstante, y juegue quien juegue, el Castellón está centrado en lograr la permanencia y todos han de sumar a la causa.