El próximo martes marcará un antes y un después en las gestiones que se llevan a cabo desde el Ayuntamiento de Vila-real para que, lo más pronto posible, arranquen las obras de construcción de la nueva comisaría de la Policía Nacional, que se levantará en parte del espacio que ahora ocupa el aparcamiento público existente frente al Palau de Justícia.

Y es que será ese el día en el que el pleno de la corporación municipal --previsiblemente por unanimidad-- dé el visto bueno definitivo a la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana que concluye el proceso de cambio de uso del solar en cuestión, que pasa a ser de equipamiento comunitario a calificarse finalmente como sistema general para fuerzas de seguridad.

El concejal de Territorio, Emilio Obiol, recuerda que esta aprobación es el paso final antes de proceder a la cesión del terreno. Una cesión del suelo que el propio alcalde de la ciudad, José Benlloch, confía en que permita arrancar las obras de construcción del edificio policial antes de finalizar el presente ejercicio.

El edil Obiol destaca que la tramitación del expediente ha contado con máxima prioridad desde que la Dirección General de Policía del Ministerio del Interior diera el visto bueno, el pasado mes de marzo, al emplazamiento propuesto por el consistorio.

Proyección comarcal

Asimismo, el concejal incide en que se trata de una dotación de carácter comarcal que «se ubicará en un espacio estratégico, delimitado por las avenidas Matilde Salvador, Europa y la calle Francisco Moreno, con buenos accesos y con facilidades para la movilidad, al disponer de aparcamiento así como una parada del autobús urbano y estar cerca de la estación del tren».

Obiol hace hincapié en «la necesidad de contar cuanto antes con la posibilidad de ceder los terrenos para que el Ministerio del Interior pueda acometer muy pronto la construcción de la comisaría, una infraestructura imprescindible para mejorar las condiciones de trabajo del cuerpo policial y para responder a las necesidades de la nueva Vila-real del siglo XXI. Por eso hemos intentado tramitar con la máxima diligencia este cambio del PGOU, siguiendo, eso sí, todos los procesos administrativos correspondientes».

El solar, de titularidad municipal, tiene una superficie de 5.500 m², de los que se edificará en 3.100 m², en un área de expansión a dos kilómetros de la ubicación actual, y desde el Ministerio valoraron la idoneidad del mismo por su cercanía a un área de servicios, a la sede judicial y por las infraestructuras de comunicación. 

Siete millones para el edificio

El equipo de gobierno que lidera el alcalde de Vila-real José Benlloch, trabaja desde hace meses de la mano del Ministerio del Interior para hacer realidad la construcción de la nueva comisaría para la Policía Nacional, que cuenta con una partida de más de siete millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado, puesto que está incluida en el Plan de Infraestructuras de Seguridad para el período 2019-2025. Unas instalaciones que pondrán fin a la precariedad de la actual sede policial, denunciada reiteradamente por vecinos y sindicatos.