El alcalde de Vila-real, José Benlloch, firmó ayer las actas de toma de posesión de 10 nuevos auxiliares administrativos a la plantilla del Ayuntamiento. Estas plazas suponen menos de la mitad de las 22 que el departamento de Recursos Humanos tenía previsto cubrir, dotadas con presupuesto, en un proceso de aprovisionamiento de personal, al que solamente respondieron 17 de las 100 personas convocadas en la bolsa. 

«Estamos haciendo un enorme esfuerzo para dotar al consistorio del personal que necesita y merece pero, a pesar de contar con el dinero y la voluntad firme de cubrir las plazas, nos encontramos con situaciones incomprensibles como que de una bolsa de 128 personas y un centenar de personas contactadas directamente, apenas se han presentado 17 y tan solo hemos podido cubrir 10 de los 22 puestos que teníamos previsto dotar», lamenta Benlloch.

Los nuevos auxiliares administrativos se incorporarán a los departamentos de Servicios Sociales, Atención Ciudadana, Sanciones, Tesorería y Catastro. Para la provisión de las 22 plazas previstas, se habían reservado 135.000 euros para cubrir los salarios y gastos de Seguridad Social hasta fin de año

Déficit de personal

«Somos conscientes del déficit de personal que tenemos en el Ayuntamiento y estamos poniendo todos nuestros medios y esfuerzos para optimizar los recursos e incorporar personal, a pesar de las tremendas dificultades a las que nos enfrentamos, derivadas del pago de la herencia y empastres del PP a los que sumamos una inflación galopante y unos costes energéticos que van camino de triplicarse en tan solo un año», incide el alcalde.

Tanto Benlloch como el edil del área, Álvaro Escorihuela, trabajan en alternativas y procesos para reforzar la plantilla de auxiliares administrativos y otros puestos aún pendientes. Con todo, advierten que «los tiempos en la Administración son lo que son y ello nos retrasará mucho el aprovisionamiento de plazas».