Los socialistas confían en la convención de València para su giro de tendencia

La carrera electoral cogerá velocidad el próximo fin de semana con el gran acto de precampaña de los socialistas españoles: su convención municipal, dos días de encuentro con presencia estelar del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Será el protagonista el domingo, en un acto en el que compartirá escenario con el jefe del Consell, Ximo Puig, y la candidata a la alcaldía de València, Sandra Gómez. El sábado será el día del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y de otros candidatos a alcaldes en lugares señalados para el partido: Sevilla, Madrid, Toledo y Vigo, cuyos candidatos coordinarán distintas mesas de trabajo. El encuentro es la confirmación de que la madre de todas las batallas en las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo está en la Comunitat.

Ferraz considera el acto como el que ha de certificar el cambio de tendencia en la percepción social de Sánchez que ya aparece en algunas encuestas y que se considera que, aunque viene de antes, tuvo su momento clave en la moción de censura presentada por la ultraderecha. 

Los socialistas entienden que la figura del líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, está en declive y en esa línea quieren percutir en la convención de València con el objetivo puesto en el 28M. Esta reunirá en las Ciutat de les Arts i les Ciències a dos mil mandos socialistas durante tres días.

Este cambio de tendencia hace también más aceptable la figura de Sánchez en el socialismo valenciano. Tras el conflicto por el recorte del trasvase del Tajo al Segura, la ausencia de la nueva financiación autonómica, la escasez de inversiones estatales en Alicante, una política de Costas poco beneficiosa para distintas comarcas y las críticas a la ley del ‘solo sí es sí’, la consigna en la dirección socialista valenciana fue distanciarse de Moncloa y de Sánchez.

Cita en Moncloa

Algo ha cambiado. La reforma del ‘sí es sí’ a pesar del rechazo de Podemos, la coincidencia de indicadores económicos favorables y la mejora en la percepción social del Gobierno a partir de la fracasada moción de censura han movido cosas. Que el movimiento del partido en las últimas semanas haya sido hacia el centro ayuda a la conexión con las posiciones valencianas, que van en esa dirección.

Puig y Sánchez tienen pendiente incluso un encuentro en Madrid en próximas fechas, señalan las fuentes consultadas, al margen de la cita de este fin de semana en València. Es la constatación de que algo ha cambiado.

No todo. El líder del PSPV y candidato a la Generalitat insiste en destacar el carácter valenciano de las elecciones del 28 de mayo y en su rechazo a plantearlas como un plebiscito al Gobierno o un anticipo de las generales de final de mayo. «Pensar en términos de elecciones nacionales supone una falta de respeto a los valencianos y valencianas», dijo Puig ayer en l’Alcora, donde asistió a la tradicional Festa del Rotllo.

Precampaña

Al respecto, Puig hizo notar que los socialistas han comenzado ahora la precampaña, mientras que «otros lo están desde hace meses e, incluso, años». «Vamos a intentar tener una conversación con la sociedad valenciana para explicar de dónde venimos y dónde pensamos ir. Y venimos de un pasado que no era el más conveniente para la Comunitat y todas las cifras económicas y sociales han mejorado en estos años».

El president remarcó que en la cita del 28M «se deciden muchas cosas: cómo funcionan la sanidad y la educación, si avanza la economía o si vienen grandes proyectos o no». «Eso se dilucida ahora, no dentro de unos meses», dijo.

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