Las palabras del nuevo obispo del norte de Castellón

El papa Francisco ha nombrado a Sergi Gordo Rodríguez obispo de Tortosa, diócesis que comprende también las comarcas del norte de la provincia de Castellón. Así lo anunció ayer la Nunciatura Apostólica a la Conferencia Episcopal Española. La misa de inicio de su ministerio y toma de posesión canónica se celebrará el sábado, 9 de septiembre a las 11.00.

Gordo releva en el cargo a Enrique Benavent, nominado arzobispo de Valencia en octubre. Mientras la sede tortosina ha estado vacante, desde el 12 de diciembre de 2022, ejerce como administrador diocesano José Luis Arín Roig.

El Papa Francisco nombra a Sergi Gordo obispo de Tortosa, que engloba a municipios de la zona norte de Castellón

Primeras palabras

Las primeras palabras de Gordo estuvieron dirigidas a sus nuevos diocesanos asegurando: «Me tienen desde el minuto cero a su disposición». Viene con la intención de «escuchar y aprender mucho» y dejarse empapar por toda persona de buena voluntad de esta diócesis. «Quiero llevar la buena noticia, que para eso me envía el Señor, para que sea anunciado su evangelio», aseveró Gordo. 

«Me tienen desde el minuto cero a su disposición»

 Asimismo se dirigió a los fieles, miembros del pueblo de Dios; personas de buena voluntad, de cualquier credo, confesión o convicción, y autoridades de Tortosa y pueblos de la diócesis. «Quiero que cuenten conmigo como un hermano», dijo el prelado electo.

Esperanza

«Es momento de vernos, conocernos, querernos y dar testimonio de que si somos hermanos el mundo creerá», agregó. «Me gustaría mucho que llegara este mensaje de alegría y esperanza a todos los hogares tortosinos, los que están en la costa, más al interior, en las tierras de Castellón, limitando con Teruel, Zaragoza...», aseveró.

Entiende su nombramiento como un llamamiento al trabajo interdiocesano. «El Papa me envía a una diócesis hermana», indicó el hasta ahora obispo auxiliar de Tortosa, recordando a sus antecesores, como Javier Salinas o Enrique Benavent.

Diócesis acogedora

Por su parte, el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, destacó que es una «alegría» el nombramiento de Gordo como obispo de Tortosa, aunque admitió un punto de tristeza por perderlo en la archidiócesis de Barcelona, subrayando el trabajo realizado estos años. Señaló que es una diócesis acogedora y que lo hará muy bien allí refiriendo que «tendrán muy buen obispo. Le deseamos un feliz trabajo», dijo. 

"Tendrán muy buen obispo. Le deseamos un feliz trabajo"