ENTREVISTA | Eduardo Martínez de Dueñas Oncólogo del Hospital Provincial de Castellón

Un oncólogo del Provincial de Castellón: «El diagnóstico precoz reduce el riesgo de morir por cáncer de mama»

Eduardo Martínez de Dueñas, oncólogo del Hospital Provincial de Castellón, da las claves para prevenir el cáncer más diagnosticado en mujeres

El doctor Eduardo Martínez de Dueñas, oncólogo del Provincial, destaca la importancia de la prevención

El doctor Eduardo Martínez de Dueñas, oncólogo del Provincial, destaca la importancia de la prevención

Carmen Tomás Armelles

Carmen Tomás Armelles

El prestigioso oncólogo del Hospital Provincial, Eduardo Martínez de Dueñas, destaca la importancia del diagnóstico precoz, porque reduce el riesgo de morir por cáncer de mama. Este jueves se celebró el Día Mundial de esta enfermedad.

El cáncer de mama ya es el más frecuente en mujeres...

Sí, los cánceres más frecuentemente diagnosticados hoy en día en mujeres son los de mama y en segundo lugar los de colon y recto.

¿Qué tasa de mortalidad tiene?

El cáncer constituye la segunda causa de muerte en España (25% de los fallecimientos), por detrás de las enfermedades del sistema circulatorio (26% de las muertes). En las mujeres, el de mama es el tumor responsable de una mayor mortalidad, seguido por los de pulmón, colon y páncreas.

Continuamos viendo desde hace más de 20 años un progresivo y significativo descenso de la mortalidad por cáncer de mama, que refleja las mejoras en la supervivencia de las pacientes debido a las actividades preventivas, las campañas de diagnóstico precoz y los avances terapéuticos.

La supervivencia neta de una mujer diagnosticada de cáncer de mama a los cinco años del informe es del 86%, según desprenden las últimas estadísticas validadas.

¿Y qué factor o factores pueden propiciarlo actualmente?

El riesgo se debe a una combinación de factores como la edad (la mayoría de los cánceres de mama se diagnostica después de los 50 años), así como antecedentes personales o bien familiares.

La presencia de una mutación genética heredada en ciertos genes, como BRCA1 y BRCA2, tienen mayor riesgo de presentar cáncer de mama y de ovario. También puede aparecer debido a tratamientos previos con radioterapia administrada para otras enfermedades (linfoma de Hodgkin). Tener mamas densas o algunas enfermedades benignas de la mama (como la hiperplasia ductal atípica o el carcinoma lobulillar in situ) son otros factores de riesgo junto con la inactividad física.

 ¿Cómo prevenirlo?

Hay que mantener un peso saludable, realizar ejercicio físico regularmente y moderar el consumo de alcohol. Si está recibiendo algún tipo de terapia hormonal o anticonceptivos orales, debe consultar con su médico acerca de los riesgos. Si es posible se aconseja dar lactancia a los hijos y, si tiene antecedentes familiares de cáncer de mama o mutaciones genéticas heredadas en sus genes BRCA1 y BRCA2, el especialista informará a la paciente acerca de las posibles maneras de reducir su riesgo.

 ¿Qué factores pueden mejorar el diagnóstico o la supervivencia?

Aunque las pruebas de detección del cáncer de mama no pueden prevenir la aparición de esta enfermedad, sí que pueden ayudar a encontrar el cáncer en sus etapas iniciales, cuando es más fácil de tratar. Participar en las campañas de detección precoz realizándose mamografías con regularidad puede reducir el riesgo de morir por cáncer de mama.

 Por otra parte, durante las últimas décadas se han producido significativos avances terapéuticos. Los estudios o ensayos clínicos son investigaciones médicas autorizadas por las autoridades sanitarias y los comités éticos que buscan descubrir nuevas opciones de tratamiento y que han permitido mejorar notablemente el pronóstico del cáncer de mama durante las últimas décadas.

 ¿A qué edad deberían empezarse a hacer las mamografías?

La Conselleria de Sanitat recomienda que las mujeres entre 45 y 70 años de edad, que tengan un riesgo promedio de cáncer de mama, se hagan una mamografa cada dos años. Las mujeres entre 40 y 45 años con factores de riesgo, como los que hemos comentado anteriormente, deben hablar con su médico sobre cuándo deberían comenzar a hacérselas y con qué frecuencia. Y dado el aumento de la esperanza de vida en las mujeres de nuestro medio, es posible que en un futuro se pueda extender las campañas de diagnóstico precoz hasta los 74 años.

¿Hasta qué punto es importante la autoexploración?

Aunque en los estudios a tal efecto no se ha demostrado que los exámenes clínicos de las mamas ni las autoexploraciones disminuyan de una forma clara el riesgo de mortalidad por cáncer de mama, sin embargo estar familiarizada en cómo se ven sus mamas y cómo se sienten al tacto puede ayudar a una mujer a notar síntomas como bultos nuevos no presentes con anterioridad, dolores o cambios en el tamaño o aspecto que puedan ser preocupantes y que se deben informar a su especialista. Con cierta frecuencia es la propia mujer la que detecta este tipo de cambios que permiten diagnosticar de forma más precoz.