CAMPAÑA EN TODAS LAS PARROQUIAS Y LAS MISAS DEL FIN DE SEMANA CON MOTIVO DEL DÍA CONMEMORATIVO, ESTE 19 DE MARZO

Se buscan sacerdotes para la diócesis de Segorbe-Castellón: 'Padre, envíanos pastores'

El obispo realiza una llamada para paliar el largo «invierno» de vocaciones en tierras castellonenses

Ordenación sacerdotal en Castelló.

Ordenación sacerdotal en Castelló. / Mediterráneo

Cada 19 de marzo, por San José, la Iglesia católica celebra el Día del Seminario. La diócesis de Segorbe-Castellón, ante el desafío de la falta de vocaciones, ha secundado este 2024 la campaña nacional con el lema Padre, envíanos pastores. Una llamada a Dios para echar un cable. Con la misa vespertina del sábado y la dominical de hoy, junto a la hoja parroquial, con testimonios y una carta del obispo Casimiro López-Llorente, han querido sensibilizar de la necesidad de más religiosos (frailes y monjas) y, sobre todo: curas para las parroquias.

«Nos urge --y mucho-- recuperar o intensificar nuestro amor y compromiso con nuestros seminarios. Sufrimos un fuerte invierno de vocaciones en el mundo occidental, que entre nosotros alcanza extremos muy preocupantes. El número de seminaristas es muy escaso y muy pocos proceden de nuestras comunidades», afirma el obispo. Y añade que «no solo escasean las vocaciones al sacerdocio, también a la vida consagrada y los bautismos. Necesitamos dar a nuestra pastoral un tinte vocacional, comenzando por la formación cristiana de nuestros niños y la catequesis de iniciación». 

Interés por lo económico

El documento analiza cómo «el contexto cultural actual propugna un modelo de hombre sin vocación: interesa lo inmediato, lo útil, el tener, el disfrute de la vida, la fama, ostentación y poder. El futuro de niños, adolescentes y jóvenes, en la mayoría de casos, se reduce a elegir una profesión para lograr una buena posición económica». Otros hándicaps de los jóvenes son «la renuncia a comodidades terrenales, celibato o falta de compromiso», que se puede superar con «tiempo, oración y reflexión».

La diócesis de Segorbe-Castellón cuenta con 35 religiosos (frailes y monjas; hace 20 años podían ser 80) y 175 sacerdotes (similar al 2005, con 172). No hay dificultades para atender las parroquias. Si bien los curas oriundos de Castellón son los mínimos y los más mayores; y en pueblos del interior es frecuente que un cura atienda varios municipios, tendencia que irá a más. Como en Llucena, Castillo de Villamalefa y Villahermosa del Río, que atiende Héctor Gozalbo, delegado de Medios de la diócesis; o en Cortes de Arenoso, San Vicente de Piedrahita y Zucaina, que lleva  Servilient Ndagijimana --antes, un cura oficiaba en Zucaina y otro en Cortes y San Vicente, pero tras la jubilación, se reorganizó--. Cada año se jubilan o fallecen presbíteros, sin apenas relevo. Y eso que su retiro es tardío, a los 75 años. «E incluso los hay activos de más edad, como Miguel Simón, a sus 78 años, en la Concatedral de Santa María; y algún otro con 80», cuentan. 

Nuevos diáconos en este 2024.

Nuevos diáconos en este 2024. / Mediterráneo

La edad media de la plantilla eclesiástica oscila entre los 40 y 60 años; con alguno de 30. «Son pocos los jóvenes de Castellón. Muchos son originarios de fuera de la diócesis y trabajan aquí: de Italia, Ciudad Real, Guatemala, Vizcaya, Valencia, Chile, Navarra, Morón de la Frontera, Esplugues, Lugo, Costa Rica...», apuntaron. «La mejor manera de alimentar vocaciones es que los curas seamos coherentes con nuestra vida», reflexiona.

En los últimos 15 años, las ordenaciones sacerdotales son una de media al año, dos o tres (en este 2024: dos de Madrid y uno de Castelló); cuando antaño, como en la promoción del 2005, fueron 10.

Dos seminarios para la 'cantera', con pocos oriundos de Castellón

Los seminaristas son 18 en total y, desde el curso 2022-2023, los del Mater Dei de Castelló se han unido a los de La Inmaculada, en Moncada (Valencia), donde estudian en la Facultad, conviven con otros de Baleares y regresan a Castelló el fin de semana. El rector del Seminario Mayor diocesano Mater Dei (en Castelló), Juan Carlos Vizoso, apunta que de los cinco seminaristas actuales, dos son de Castellón y uno es diácono, y entran con unos 20 años, en edad universitaria. De 2000 a 2010 llegaron a tener 50 jóvenes. «La falta de vocación religiosa es ampliable a otros compromisos, la gente se casa menos. ¿Qué se puede hacer para que la gente tenga capacidad de entregar su corazón, en un compromiso? Cuando uno vive seriamente su fe se plantea cosas grandes como entregar su vida a Dios», manifiesta. 

En el Seminario Mayor diocesano, internacional y misionero Redemptoris Mater (en Betxí), reciben a jóvenes de cualquier parte del mundo y ellos pueden ser enviados también a cualquier destino, incluida la propia diócesis. El rector de la institución, Pablo Vela, recuerda que el de Castellón abrió en 1998. Entonces había unos 60 en todo el mundo; ahora, 115. En el año 2000 el de Betxí albergaba 24 seminaristas y ahora 13 (la mitad). «Dos son diáconos, tres están en misión pastoral (en Dinamarca, Portugal y Japón), y ocho aquí estudiando. Son tres de Castellón y el resto de origen diverso: Nicaragua, Vietnam, El Salvador, Paraguay, Murcia, Zaragoza, Pamplona, Madrid,...», citó. 

Sacerdotes en activo valoran que «antes se vivía y se transmitía la fe en familia. Tus padres, tus abuelos, iban a misa y había un compromiso. Ahora solo van para catequesis y Comunión». Otros creen que «se tiene una imagen negativa por el estigma de la pederastia». En positivo ven que «los curas de ahora tienen más vida social y abierta a la comunidad, polifacéticos y con aficiones. Los hay con miles de seguidores en redes sociales; que organizan conciertos o pinchan música en la Jornada Mundial de la Juventud con el Papa».

Semillas e ideas para afrontar el futuro

¿Qué ocurrirá en 15 años si persiste el déficit de vocaciones? El brainstorming (tormenta de ideas) aparece ya en reuniones en el Obispado. No hay plan trazado, pero sí propuestas, como las siguienets:

  • Asignar mas pueblos a curas en zonas rurales.
  • Celebrar en ellos misa cada 15 días en lugar de semanal.
  • O permitir que gente muy comprometida con la Iglesia celebre la Palabra de Dios con lecturas, sin homilía.

Charlas a colectivos para atraer nuevas vocaciones en las parroquias

La hermana Catalina Nowak (polaca, de 50 años), recaló hace seis años y vive con otras cuatro religiosas de 39 a 50 años en la congregación de Hermanas de Nazaret, en Benicàssim. En este tiempo acogió seis meses a una hermana filipina y, ahora, a una aspirante valenciana

Montse, aspirante a monja, recién recibida por la comunidad religiosa de Hermanas de Nazaret en Benicàssim.

Montse, aspirante a monja, recién recibida por la comunidad religiosa de Hermanas de Nazaret en Benicàssim. / Mediterráneo

Montse, con las Hermanas de Nazaret de Benicàssim.

Montse, con las Hermanas de Nazaret de Benicàssim. / Mediterráneo

El obispo encomendó a Catalina preparar una charla sobre La vida como vocación, y la presenta a feligreses, comunidades, catequistas, jóvenes, etc. (solo tienen que escribir a casacsfn@gmail.com). «Me he reunido ya con grupos de diferentes edades en Benicàssim, la Vall d’Uixó y Burriana. Seguiremos tras Pascua y el próximo año pastoral», dijo. Opina que «la gente tiene miedo al compromiso de por vida (vocación o matrimonio), que exige un esfuerzo. Los jóvenes confunden felicidad con placer, inmediato y fácil». 

Ordenación de nuevos sacerdotes para el 11 de junio

El próximo día 22 de junio de 2024, a las 11.00 horas, el Obispo de Segorbe-Castellón administrara en la Santa Iglesia Concatedral de Santa María de Castellón de la Plana el sagrado Orden del Presbiterado a aquellos candidatos, que, reuniendo las condiciones de la normativa canónica, habiendo cursado y superado los estudios eclesiásticos así como habiéndose preparado humana y espiritualmente bajo la orientación y guía de sus formadores y la autoridad del Obispo, aspiren a la recepción del Presbiterado.

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