El boquerón fresco de lonja ronda los 15 euros en las pescaderías

Quienes estén acostumbrados a comprar pescado fresco de las lonjas castellonenses, este marte se habrán llevado una sorpesa en los mostradores de las pescaderías. Como ya se vaticinaba tras la subasta del lunes, los precios del boquerón se han disparado hasta rondar los 15 euros de venta al público. Algo muy excepcional, tanto como las circunstancias que han motivado el repunte.

Lo habitual, según explica el gerente de Pescados Luispe, en el Mercado Central de Castelló, es que para piezas de un tamaño medio de entre 50 o 55 unidades por kilo, el precio normal en lonja está entre los 4 o 5 euros el kilo, lo que se traduce en la venta directa al consumidor en unos 7 o 8 euros. Ayer quien quiso consumir boquerón castellonense tuvo que pagar prácticamente el doble.

El precio del boquerón en lonja marca un tope histórico: 76 euros por 8,5 kilos

Asegura Luis que si bien es cierto que hay poca oferta y bastante más cara de lo normal, «la gente no deja de comprar». Expone que «la clientela sabe que está pagando calidad, la que ofrece el pescado que llega del puerto del Grao».

Que iba a producirse la escalada en la valoración de esta especie se intuía. Tanto es así que algunos comerciantes, como el propietario de una pescadería de Burriana, ayer optó por no servir a sus clientes boquerón de Castellón, y se decantó por el producto que se distribuye a través de Mercavalencia. «Se sabía que iba a salir caro y ni siquiera fui a la subasta», explica. Como él, otros establecimientos.

Situación puntual

En Pescados Luispe remarcan que esta es una situación «muy puntual», en la línea de lo que ya expuso el lunes en Mediterráneo el representante de la patronal de armadores en la sección de cerco de la Cofradía de Pescadores de Castellón, José Luis Ramírez. Hay poco pescado «por el mal tiempo, el norte ha fallado, Cataluña también», los puertos de Almería y Granada están de parada biológica, «y el que necesita el pescado, ha pagado lo que se ha pedido». Como con cualquier otro producto, que en el Mercado Central ayer se comprara el boquerón a 14,8 euros no es más que la consecuencia de las leyes del mercado, a mucha demanda y poca oferta, el producto se encarece.

La tormenta perfecta para que el boquerón alcance precios nunca antes vistos en esta provincia la ha provocado la conjunción de lo ya mencionado, la escasez de capturas de forma generalizada en las diferentes subáreas de gestión por la meteorología adversa, y el inicio de la Semana Santa, una época en la que, de manera especial en territorio andaluz, se multiplica la demanda, porque este es uno de los productos estrella de su gastronomía turística.

Los pescadores y comerciantes asistieron, por tanto, a subastas con cifras poco o nada habituales. A los 76 euros que llegó a pagarse por una caja (entre 8 o 8,5 kilos) en la lonja de Castelló, y los 85,70 que se alcanzaron en Gandía, se suman los 65 euros en los que se detuvo la puja en Burriana.

Al puerto castellonense llegaron 49 cajas de boquerón y al de Burriana unas 200 que sumadas a las que se contabilizaron en el puerto valenciano, el lunes hubo «500 cajas en tres puertos». Muy poco pescado, dicen los que entienden, pero no porque haya escasez en el mar. «Ahora cuando vuelva el anticiclón y haga buen tiempo, todo volverá a la normalidad», explica Luispe. Aunque apunta al 1 de mayo para recuperar la dinámica de los precios, cuando finalice el mes de veda establecida para la pesca de cerco en el área de gestión de Castellón.