El nuevo contrato obliga a adaptarse a las tarifas actuales del mercado

Almassora tendrá que pagar este año 1,4 millones ante una subida de la luz del 200%

La factura eléctrica del 2023 del Ayuntamiento será tres veces más cara que el último recibo, de 478.000 €

Farolas iluminan la plaza del ayuntamiento de Almassora, entidad que este año tiene que hacer un esfuerzo económico al encarecerse el triple la factura.

Farolas iluminan la plaza del ayuntamiento de Almassora, entidad que este año tiene que hacer un esfuerzo económico al encarecerse el triple la factura. / Erik Pradas

El prolongado aumento del precio de la luz en España no entiende de particulares ni administraciones. Aunque son los ciudadanos de a pie los que llevan sufriendo más desde hace bastantes meses el desmedido incremento en su factura, también las instituciones públicas tienen que apretarse el cinturón y hacer un esfuerzo económico para costear unos recibos eléctricos cada vez más desorbitados.

Que se lo digan al Ayuntamiento de Almassora, que este año se verá obligado a pagar la friolera de 1,4 millones de euros para hacer frente a una subida del 200% del coste de la luz. Este aumento porcentual se traduce en que la factura de este ejercicio será tres veces más cara que la del anterior.

Evolución del gasto de la factura de la luz en Almassora.

Evolución del gasto de la factura de la luz en Almassora.

Tal como refleja el gráfico, el importe del recibo del 2022 ascendió a 478.000 euros, que fue el valor más bajo en la serie durante los últimos cinco años (por la gran inversión que hicieron en instalar alumbrado led).

Además de implementar alumbrado led en parte de la vía pública (ya hay equipos de bajo consumo en las avenidas principales, polígonos industriales, diferentes parques y una zona de la playa), también han colocado placas solares en edificios municipales como el propio consistorio.

Remanentes

Buena parte de los remanentes van a hacer frente a este notable incremento del recibo municipal

La razón de este disparado incremento se debe a que el consistorio ha tenido que formalizar un nuevo contrato de energía eléctrica tras haber finalizado el anterior, lo que le ha conllevado a darse de bruces con la realidad al tener que adaptarse a las tarifas del mercado en este sector.

Este gasto ineludible para las arcas municipales ha obligado, lógicamente, al equipo de gobierno a mover ficha para reforzar esta partida. Tal como aprobó el pleno en sesión del pasado 13 de marzo, buena parte de los 2.936.099,49 euros de remanentes que han aflorado tras liquidar el presupuesto del 2022 irá necesariamente a costear la encarecida factura.

Guía de buenas prácticas

Más allá de esta modificación de crédito, viendo el desembolso que le va a suponer la subida de la luz, el Ayuntamiento ha puesto en marcha una guía de buenas prácticas para reducir el consumo todo lo posible entre el personal municipal. Entre otras medidas, todos los ordenadores tienen que apagarse al acabar la jornada laboral. También afecta a las impresoras y fotocopiadoras, con el objetivo de fomentar la reducción de las copias, la impresión a doble cara y la reutilización de folios usados por una cara.

Los cargadores de móviles deben desconectarse una vez esté llena la batería del dispositivo. No podrán usarse estufas de uso personal y recomiendan utilizar siempre que se pueda las escaleras en vez de ir por el ascensor. 

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