FIESTAS DEL ROSER

Almassora cuelga el 'no hay billetes' en una tarde de toros de alta expectación en la Vila

Un Adolfo Martín abre el cartel y brilla por sus hechuras e infunde respeto en la arena

Los otros dos astados se dejan ver por el recinto y se resisten a ser devueltos a los corrales

Almassora vibra con una triple exhibición taurina el lunes de fiestas del Roser

Erik Pradas

Patricia Rodríguez

Almassora ha colgado este lunes el cartel de no hay billetes en la Vila. Sobraban los motivos para que las calles del casco antiguo congregaran a una multitud de aficionados: un lunes festivo, tres toros en cartel y tres encastes, con el aliciente de abrir tarde con un Adolfo Martín.

El hierro de don Adolfo cuenta con fieles seguidores que este lunes, a las 18.00 horas, aguardaban ansiosos en la plaza Mayor para ver el juego del número 69, financiado por las peñas El Rollet, La Fuga, La Travessa, l’Emboscà, l’Artiste, La Katrava, La Divisa, La Kurda, El Porrat, La Maraña, La Traska, La Xasca y El Vaivén. Recibió Hugo al Albaserrada, de bonitas hechuras, que se fue a las calles dónde fue seguido con expectación y respondió a los cites.

La emoción ha acompañado la salida del segundo, de Arcadio Albarrán y patrocinado por El Trasto y la Juventud Taurina, al que precedió un minuto de silencio en recuerdo de Carmina Samper. Sus sobrinos, miembros de la Juventud, han depositado un ramo de flores en la puerta se toriles y así ha aparecido Coruñero por la puerta pequeña, con brío y entrando bien a las rodadas de Rafa Lorite o Raulillo. Ha apretado a Jordi Cubertorer en la Picaora, donde lo ha templado Richard con la chaqueta. Se ha resistido a ser encerrado.

Las mejores fotos de la tarde taurina del lunes de fiestas en Almassora

Foto del minuto de silencio en memoria de Carmina Samper. / Erik Pradas

La reina Elena Portalés y su corte Joana Adsuara, Adrián Campos, Dean Curic y Carla Escuder han contemplado la salida del Monteviejo desde el balcón de Ca la Vila. Vinatillo, el astado aportado por la Penya Taurina, se presentó en el epicentro de la Vila llamando la atención por su pelaje. El número 36 ha preferido calle, donde lo han probado con la chaqueta y ha embestido con ganas en la plancha de la peña Els Penjats. Ha hecho caso omiso a los cabestros y ha tenido que ser enlazado para volver a corrales.