Almassora consigue 3,8 millones de remanentes y se une por la cerámica

El pleno ordinario de marzo del Ayuntamiento de Almassora dio cuenta este lunes por la tarde de la liquidación del presupuesto del pasado ejercicio, que se salda con un remanente de tesorería de 3.807.292,45 euros. El concejal de Hacienda, José Claramonte, explicó que todavía queda fijar el posible destino de esta cuantía, al estar aún pendiente la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Claramonte avanzó que las previsiones pasan por destinar 465.000 euros del montante a «inversiones financieramente sostenibles», que el equipo de gobierno acordará en los próximos meses.

El responsable de Hacienda destacó el hecho de que se hayan logrado mejoras en diversos contratos de servicios públicos actualizados, como el de la limpieza viaria y la de colegios o el de accesos y limpieza de instalaciones deportivas, a pesar de haber recaudado «casi 240.000 euros menos» en impuestos directos. Así, han pasado de los 10.153.152,6 euros del 2022 a los 9.913.212,55 del 2023.

Transferencias de capital

Las aportaciones de otras administraciones para el gasto corriente del consistorio, así como el sustancial aumento de las transferencias de capital para financiación de inversiones, con un incremento de 2,37 millones sobre lo recibido en el 2022, se deben al plan Edificant de la Conselleria de Educación y a fondos de la Unión Europea, correspondientes en este caso a las estrategias de desarrollo urbano sostenible e integrado (Edusi).

También es reseñable el incremento de 428.550,83 euros sobre el presupuesto inicial de un millón de euros en la tasa para la utilización privativa del dominio público que abonan las empresas suministradoras de servicios, circunstancia que contrasta «un mayor incremento empresarial». 

Durante la sesión recordaron la aprobación de planes estratégicos de subvenciones de las concejalías de Juventud, Cultura, Educación y Deportes, dos de ellos caducados desde hacía varios años. 

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Apoyo al azulejo

Entre las mociones presentadas, el PP presentó una para exigir ayudas urgentes de apoyo al sector cerámico, que aprobaron por unanimidad. En el documento, el Ayuntamiento insta al Gobierno central a convocar con urgencia una línea de ayudas dirigidas al azulejo y a introducir desgravaciones fiscales para compensar el precio del gas y la electricidad, similares a las efectuadas por otros gobiernos como el italiano, para apoyar la viabilidad y mejorar la competitividad de las empresas dedicadas a la cerámica.

También instan al Ejecutivo a que, de manera extraordinaria, específica y temporal, los trabajadores del azulejo no consuman paro mientras estén en situación de ERTE como consecuencia de la crisis de precios y ventas del sector relacionada con la subida de los precios de la energía.

Asimismo, piden al Consell que establezca un plan estratégico con plazos e inversiones definidas, así como apoyar y tomar partido institucionalmente por el sector y sus necesidades. Y solicitan, además, que medie con las empresas del sector y los inversores para evitar el cierre de empresas y centros de producción y establecer un programa específico de formación, acompañamiento y orientación laboral para los trabajadores del sector cerámico afectados ya por cierres.