INFRAESTRUCTURAS FERROVIARIAS

AVE ve "avances" en el corredor mediterráneo, pero "más lentos de lo deseable"

Los empresarios impulsores del movimiento #Quierocorredor se arrogan las mejoras en la infraestructura tras la presión de los siete años de actos reivindicativos 

Las autoridades presentes en la jornada del Corredor en Madrid.

Las autoridades presentes en la jornada del Corredor en Madrid. / Europa Press

Laura Ballester / Paula Blanco

Séptima convocatoria de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) para reivindicar la ejecución del corredor mediterráneo bajo el lema «nos jugamos el futuro». El destino quiso ayer que la jornada reivindicativa que se convoca de forma ininterrumpida desde 2016 se celebrara en Madrid y que coincidiera con la investidura de Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados, a diez kilómetros en línea recta de Ifema. 

Aunque los asistentes estaban más que nunca pendientes de sus móviles, los empresarios de AVE, inasequibles al desaliento, lograron volver a reunir a 1.800 empresarios, representantes de la sociedad civil y políticos de solo dos de las cuatro autonomías que atraviesa el corredor mediterráneo.

Acudieron los presidentes valenciano y murciano, Carlos Mazón y Fernando López Mira. La reivindicación de la celeridad para que las regiones litorales pongan en servicio el eje ferroviario de Algeciras a la frontera francesa ni siquiera figuraba en las agendas de Juan Manuel Moreno Bonilla y Pere Aragonés, presidentes de Andalucía y Cataluña, respectivamente. 

En obras

Una conexión que cada día está más cerca aunque el corredor mediterráneo siga siendo una entelequia al sur del río Ebro. Una entelequia con los principales tramos en obras. Pero una entelequia. Desde AVE se arrogaron ayer que esta presión que ejercen desde hace siete años ha influido en los pequeños avances que detectan en las obras del corredor mediterráneo. «Hasta que desde la sociedad civil no nos hemos implicado, no se ha conseguido que la infraestructura avance. Más despacio de lo que sería exigible y quisiéramos, pero la realidad es que sí avanza», admitió el presidente de AVE, Vicente Boluda.

«Sin nuestro empuje colectivo y perseverancia el corredor no estaría en el grado de ejecución que está, es importante que seamos conscientes del poder que tenemos, de que actuando se consiguen objetivos y de que podemos ser actores protagonistas de nuestro propio futuro», reivindicó. 

Compromiso

Una reivindicación que no pudo escuchar en directo la ministra de Transportes, debido al pleno de investidura. Pero que sí llegó al secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, David Lucas, quien mostró su compromiso público ante el auditorio de que «en 2026 tiene que estar terminado el corredor mediterráneo desde Almería a Francia. Aunque no se aventuró a dar una fecha completa para toda la infraestructura ferroviaria. Al tiempo que sacaba pecho por los 275 kilómetros puestos en servicio desde 2018 (cuando llegó a Sánchez al Gobierno) y que ha permitido la llegada del AVE a Granada, Elx, Orihuela y Murcia.

La jornada finalizó con varios debates. La primera mesa la protagonizaron José Blanco (CEO de Acento) y Pierre Giacometti (cofundador de No Com) que debatieron sobre la conexión con Europa y lo fundamental que es para el desarrollo económico. Una segunda mesa contó con la presencia de Carlos Bertomeu (Iryo y Air Nostrum), Raül Blanco (Renfe), Javier Rivera (PowerCo Spain) y Hélène Valenzuela (Ouigo España). Bertomeu consideró que acelerar las obras del corredor mediterráneo es «una cuestión de competitividad para España y una necesidad para mejorar la movilidad de ciudadanos y mercancías».

Potencial

Raül Blanco defendió que el corredor mediterráneo para Renfe tiene potencial y efectos positivos para el transporte de viajeros y mercancías».

Valenzuela destacó que Ouigo estudiará el interés del corredor mediterráneo cuando se ponga a disposición de los operadores. «Será una ruta que contribuirá al desarrollo económico, social y medioambiental de España y potenciará la movilidad sostenible». 

Por último, el CFO de PowerCO Spain defendió que «la disponibilidad de infraestructuras como el corredor mediterráneo resulta un elemento clave para que las empresas localicen en España nuevas inversiones estratégicas para la transición verde».