La primera parte de la campaña navideña del comercio de Castellón —ahora queda por delante Nochevieja y Reyes— ha finalizado con sabor agridulce, muy «desigual». Así lo apunta la secretaria general de Covaco Castellón-Confecomerç, Tere Esteve: «Para sectores como librerías, floristerías o la alimentación, sobre todo, ha ido mucho mejor que las Navidades pasadas; mientras que al textil, más ralentizado, le ha ido peor». Para la asociación de comerciantes, entre otros factores, se ha dado una disminución de reuniones sociales y el que las familiares han sido menos numerosas, con lo cual no se han comprado tantos obsequios, por ejemplo, de amigos invisibles. Con todo, hay campañas «en las que se adquieren más regalos para Reyes y esto es lo que está por ver; el comercio sigue trabajando con la esperanza de que Reyes compense», apuntó. De hecho, el 3 de enero aún será festivo aperturable para comprar.

UNA VÍA DE ESCAPE

Precisamente, cómo termine esta campaña comercial de Navidad-Reyes marcará, y mucho, cómo serán las próximas rebajas de invierno (con el 10 de enero como domingo aperturable). Para una parte de vendedores van a ser «agresivas», a fin de liquidar el estoc en un año de caída de ventas por el coronavirus, aunque también con menos género adquirido para otoño-invierno. Algunas franquicias, como siempre, ya han tomado la delantera y colgaban el cartel de «Rebajas» en Castellón pocos días antes de Navidad, pero en su mayoría, las tiendas optarán por iniciarlas entre el 2 y el 7 de enero —esta última la fecha más tradicional—. Con todo, existe libertad para elegir el periodo de descuentos de invierno, siempre y cuando se informe al cliente de la fecha de inicio y fin. «Hemos lanzado un sondeo al pequeño comercio y parece que las rebajas llegarán después de Reyes. Pero es un año atípico. La campaña de Navidad-Reyes va a resultar más decisiva que nunca, pues quien se quede con más género por vender optará por poner más descuentos luego», opinó. Y recordó que justo los pequeños establecimientos no adquieren mercancía ex profeso para rebajas y por ello sí cumplen «la función, que es liquidar restos de temporada. El textil ha sufrido muchas pérdidas por el covid y aún tiene artículos por vender de la pasada primavera-verano».

UN TERCIO PENDEN DE UN HILO

El porcentaje de descuentos y si se opta por adelantarlas, va a depender mucho de cómo le vaya a cada comercio esta campaña navideña. «A diferencia de otros años, es decisiva: tabla de salvación o cierre de un tercio del sector», apuntaron . Así, consideran que se avecinan meses muy complicados, por lo que «se debe velar desde las administraciones por medidas de apoyo al comercio, tendentes a afrontar un 2021 con unas políticas adicionales para poder salvaguardar a un sector, especialmente afectado por la crisis», afirmó. Noviembre-diciembre vienen a suponer el 60% de facturación anual y el sector espera aún que se incentive el consumo antes de la temida cuesta de enero, en hogares con una alta tasa de ahorro por impacto del covid (menos viajes, menos fiestas, etc.).