Uno de los principales retos que debe acometer el mundo del toro esta temporada es el que hace referencia a la seguridad. Peñas, ayuntamientos, comisiones y la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias buscan mejorar las infraestructuras para evitar altercados como los sucedidos el año pasado en Almenara o Viver, cuando las reses se escaparon antes de ser exhibidas en los festejos populares. Para analizar la situación y proponer acciones está previsto que el próximo mes se celebre una reunión con todos los agentes implicados, en la que estarán presentes responsables de la decena de empresas que se encargan del montaje y desmontaje de estructuras, así como los arquitectos que más infraestructuras de bous al carrer certifican.

«Es responsabilidad nuestra garantizar la seguridad, tanto dentro como fuera del recinto, ya que la gente que acude a presenciar un festejo sin participar activamente no debe asumir ningún tipo de riesgo», señaló el presidente de la Federación de Peñas Taurinas de Bous al Carrer de la Comunitat, Vicent Nogueroles, quien apostó por mejorar los toriles, plazas portátiles y demás instalaciones relacionadas.

En este sentido, Nogueroles insistió en que el mundo del toro «siempre» ha colaborado con la administración para mejorar la seguridad de los festejos. De ahí que se elaborara en la comisión consultiva de festejos taurinos un nuevo reglamento, que está olvidado en los cajones sin que el Consell dé su visto bueno. Un respaldo que se antoja casi imposible teniendo en cuenta las posturas contrarias de Compromís y Podem, socios de los socialistas en el pacto del Botànic. Por tanto, los aficionados dan por perdida esta batalla y apuestan por seguir avanzando en asuntos concretos incluidos dentro del decreto paralizado.

Y es la oposición frontal de la formación morada lo que preocupa a los aficionados, según apuntó Nogueroles, dado que ahora forman parte del Gobierno central. «Estaremos pendientes, mantenemos contactos con el PSOE, pero estamos preocupados porque este partido promueve la abolición de la tauromaquia», remarcó.

La temporada se presenta este año «fuerte», gracias a que los organizadores están primando los toros cerriles y las ganaderías de renombre. Se apuesta más por la calidad que por la cantidad. Una de las citas de la campaña será el congreso sobre bous que se realizará en la Vall en abril.