El brindis de la tranquilidad en el Villarreal

La primera parte de la temporada 2023/24 no ha sido como se esperaba en el Villarreal CF. Un inicio de campaña con dos cambios en el banquillo, malos resultados deportivos en LaLiga, aunque una buena fase de grupos en la Europa League, demasiadas lesiones, contratiempos y, principalmente, muchas dudas en lo futbolístico y un equipo mentalmente muy frágil.

El Submarino cierra un año deportivo en el que fue de más a menos en resultados y juego, muy convulso en el banquillo, y en el que se aventura un cambio de ciclo en los próximos meses. Los groguets terminan el 2023 más cerca de los puestos de descenso que de la zona alta de LaLiga, a lo que suma que ha contado con tres entrenadores en los últimos meses, aunque se confía en que la llegada de Marcelino al club debe servir para afrontar una reestructuración a largo plazo.

El brindis de Roig

La mejor noticia para los de la Plana Baixa fue acabar el año con victoria ante el Celta (3-2) en La Cerámica, ya que de perder el último partido, los amarillos estarían metidos muy abajo en la tabla, una situación que se ha ido deteriorando en los últimos meses al pasar de ser un equipo fijo en plazas europeas a estar más cerca de la zona de descenso en estos últimos meses.

Por dicho motivo, el término de dicho encuentro el presidente dela entidad, Fernando Roig, bajó al vestuario a celebrar junto a la plantilla, Marcelino García Toral y su cuerpo técnico el final de año, como hizo a su vez a finales de la pasada semana con los miembros del consejo de administración. «Estamos satisfechos por lo conseguido en el año 2023, con un equipo en Primera División, otro en Segunda y el femenino en Liga F, logrando los objetivos previstos. Ahora estamos en la temporada 23/24, que se nos ha complicado un poquito, pero que continuamos teniendo los mismo objetivos en todas las competiciones», dijo el presidente en el tradicional brindis navideño.

Un Roig que se acordó del que fuera vicepresidente, José Manuel Llaneza, «porque hay que recordar a todos aquellos que ya no están entre nosotros y desearle a toda la familia grogueta un próspero año 2024 y que nos llegue cargado de éxitos», recalcó.

Cadena de contratiempos

La salida de Unai Emery del banquillo a finales de 2022 supuso un golpe en el proyecto del club, como se ha visto con el paso de los meses. La llegada de Quique Setién, técnico que arrancó esta temporada en el banquillo, supuso parar una hemorragia de resultados y juego.

El técnico cántabro fue capaz de equilibrar el equipo en la segunda vuelta de la temporada anterior, llevándolo a Europa de forma directa. Además, con Setién se revalorizaron futbolistas como Nico Jackson y Samu Chukwueze, cuyas posteriores ventas en el mercado estival fueron importantes para la economía del club.

Pero la era Setién no fue tranquila en el vestuario, ya que el técnico chocó con sus ideas y su forma de trabajo con los jugadores de más peso dentro del mismo. De hecho, no arrancó la 23/24 como era esperado, ya que tras los malos resultados iniciales, se juntaron las desavenencias de técnico y dirigentes, lo que propició su salida del club y la llegada de José Rojo Martín, Pacheta, a la entidad tras haberse cumplido poco más de un mes de competición.

Con Pacheta se buscaba el equilibrio y apaciguar el vestuario, pero nunca llegó a alcanzar un buen nivel de juego y de competitividad, y a los dos meses de dirigir al equipo, el club decidió volver a cambiar de entrenador y apostar por Marcelino García Toral.

El regreso de Marcelino

El regreso al club de Marcelino es ya una apuesta a largo plazo, ya que se quiere buscar un cambio y reestructuración del equipo de cara a las próximas temporadas. El Villarreal cuenta con un equipo veterano de jugadores experimentados que finalizan contrato la mayoría este próximo verano, lo que hace pensar el club de tomar una decisión clara de futuro. La llegada de Marcelino se realiza con la idea de que el técnico capitanee este nuevo proyecto.

El Submarino pelea por salir de la zona baja de la tabla y acercarse lo más posible a los puestos europeos, sigue vivo en la Copa del Rey y en la Europa League, con lo que tiene abierta dos vías para poder alcanzar un objetivo de peso y mucho tiempo para enderezar el rumbo a un ejercicio 23/24 con demasiadas turbulencias.