Castellón es la tercera provincia con más ERTE activos de España

La pandemia del covid puso en el mapa la fórmula de los paros temporales, los ERTE, para que los negocios más golpeados por las restricciones sanitarias pudieran mantener a sus trabajadores con el mínimo coste posible. Transcurridos tres años desde aquella pesadilla, el número de personas afectadas se ha reducido de manera drástica con la plena reactivación de actividades como la hostelería y los establecimientos hoteleros.

La economía ha dado muchos tumbos desde entonces y esto ha supuesto que algunos sectores hayan recurrido a los ERTE para hacer frente a nuevas crisis. Es el caso de la cerámica de Castellón, que desde el encarecimiento del precio del gas natural, con su consiguiente impacto en la factura energética, ha adoptado estos paros temporales para subsistir al descenso de la producción. Un panorama que sigue bien presente en las estadísticas que cada mes da a conocer el Ministerio de la Seguridad Social.

Castellón recupera afiliados con el paro en aumento en industria y servicios

En octubre, Castellón fue la tercera provincia de España con un mayor número de personas en situación de ERTE activo, con una cifra media de 951 personas. Solo le superó, por muy poco, Madrid, con 963 casos, mientras que Barcelona encabezó este ránking, con 1.392 personas.

Diferencias de afiliación

Ante la frialdad de estos dígitos hay que considerar un detalle, la enorme diferencia de afiliación a la Seguridad Social. Castellón tiene casi 240.000 cotizantes, mientras que Barcelona alcanza los 2,8 millones y Madrid registra 3,6. Una diferencia muy notable, que se reduce de manera drástica a la hora de comprobar los ERTE.

La crítica situación que atraviesa en estos momentos el azulejo, que a su vez es la principal actividad económica de Castellón, explica estos abultados datos. Tan solo hay que ver un detalle. El grupo económico en el que está incluida la cerámica de la provincia, el de productos minerales no metálicos, es el que suma un mayor número de afectados por ERTE en el conjunto de España, con 872 de media el pasado mes. Le sigue la metalurgia, con 727 personas.

Medidas

Además de los casi 1.000 casos activos que hay en la provincia, la mayoría del azulejo, hay que tener en cuenta que son muchos más los que sufren esta situación. Desde que se adoptaron para esta industria, la mayoría de empresas puso en ERTE a la práctica totalidad de la plantilla, de modo que los casos activos se reparten. A finales del año pasado fueron más de 11.000 los empleados que estuvieron incluidos en estas listas. Solo los asalariados de los grupos cerámicos más grandes se libraron.

Otra oportunidad perdida para la cerámica: los planes de descarbonización no sirven para el sector

A esta realidad hay que tener en cuenta los ajustes laborales en forma de despidos. El caso conocido más reciente es el de la empresa Ceracasa, que tiene planteado un ERE para la mayor parte de la plantilla, como consecuencia de una crisis para que las ayudas del Gobierno solo suponen un mero parche en este sector.

La producción de cerámica sigue a la baja

La cantidad de trabajadores del azulejo afectados por ERTE no son más que la consecuencia de los malos datos del sector. El índice de producción industrial correspondiente a septiembre muestra otra fuerte caída, del 19,6%, respecto al mismo mes del año anterior. El acumulado de los primeros nueve meses de este 2023 ya es del 17,9%. Desde la patronal azulejera, Ascer, no se muestran optimistas cara al cierre del año. «No esperamos que la tendencia cambie en los meses que quedan y esteremos en esa caída de en torno al 20%, muy pareja a la bajada que estamos viendo en la demanda comercial», explican. Este retroceso se sumaría al 15% que ya se dio en el conjunto del pasado año.

Una mala coyuntura que también detecta GasIndustrial, ya que tras el desplome de 2022, «los niveles de consumo industrial siguen anclados en cifras muy lejos de la prepandemia».

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