Trabajo propone regular los riesgos laborales de 6.000 empleadas del hogar

Si hace unos años fue la batalla por la regularización, ahora el foco del Ministerio de Trabajo se centra en el derecho al reconocimiento de las enfermedades profesionales de las personas empleadas del hogar, de modo que si se produce algún accidente en el desarrollo de sus tareas se les pueda reconocer como accidente laboral de una manera automática.

En Castellón, las últimas estadísticas de la Seguridad Social apuntan a 3.504 castellonenses cotizantes en el Régimen General, en la categoría de empleados del hogar. Sin embargo, los sindicatos estiman que son muchas más. La representante de empleadas del hogar de CCOO-PV, Mirna Costa, estimó que «son prácticamente el doble las que están trabajando en la economía sumergida, otras 3.000 en la provincia de Castellón; por lo que en conjunto unas 6.000». Una cifra que podría ser perceptora de los nuevos derechos en cuanto a riesgos laborales cuyo borrador ultima el Gobierno central para su aprobación, vía real decreto, por parte del Consejo de Ministros. Por ahora, se ha avanzado la posibilidad de que estas trabajadoras «tengan derecho a un reconocimiento médico cada tres años; la obligación de asistir a cursos de prevención de riesgos; o que los particulares que las contratan para limpieza o cuidado de familiares evalúen a través de un test on line los posibles riesgos que existen en sus viviendas en cuanto a poder sufrir algún tipo de percance o accidente; y también se definen protocolos para prevenir acoso sexual».  

Para Costa, «en la ley anterior el Gobierno estatal se comprometía ya, en relación a prevención de riesgos laborales y enfermedades profesionales, a definirlas y adoptar medidas para las empleadas del hogar». De aprobarse ese nuevo decreto, «en la práctica, sería más fácil determinar que ha sido un accidente laboral y no una baja por enfermedad común». 

En opinión de la sindicalista, este cambio «puede generar a las trabajadoras del hogar más seguridad porque se habla de medidas nuevas como el reconocimiento médico --como en otros sectores--. O formación para saber que, en un momento dado, puedo decir al dueño de una casa que para limpiar esa estantería no me subo a una silla, sino que tiene que proporcionarme una escalera. Al final, que haya más seguridad es también positivo para la familia que contrata el servicio».

Riesgos de tipo mixto

Actualmente, la delegada de CCOO señaló que en el día a día, en Castellón y resto de la Comunitat, «a las trabajadoras del hogar les cuesta mucho demostrar sus enfermedades profesionales». Añadió que «podrían ser una mezcla de los riesgos laborales de limpiadoras y cuidadores de residencias de ancianos». «Depende de lo que realicen. Al final están en contacto con agentes químicos a la hora de limpiar, suben y bajan cuando ponen a punto los cristales, o tienen afecciones del túnel carpiano al barrer, o por el esfuerzo de mover el peso de una persona enferma para ducharla, etc.», detalló.

Como ejemplo, Costa citó un caso real que les ha llegado de «una trabajadora del hogar que ha tenido una fractura de coxis porque, cogiendo a una persona que cuidaba, el hombre mayor se tambaleó. Se encontraban justo en la subida del rellano y no pudo sujetarlo, por lo que cayeron los dos. Y aun así --con todo este relato-- no hay posibilidad de demostrar en muchas ocasiones que esto deriva de una enfermedad profesional en el puesto de trabajo».

Asimismo, recordó que otras de las reivindicaciones de CCOO, además de equiparar los derechos de las trabajadoras del hogar a otros sectores; es que en la cotización se eliminen los tramos, pues perjudica a empleadas y familias contratantes. «Ahora cotizan por tramos. Si una cobra entre 0 y 300 euros, por ejemplo, cotiza por 270 euros. Y una persona que limpia una vez a la semana y le pagan 100 euros al mes tiene que cotizar por 270, como si ganara eso. Y quien sí gana 300 euros está perdiendo dinero, pues cotiza por 270. La solución es cotizar por lo ganado, no por tramos.