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Las dos caras de Jesús de Miguel

Manu Sánchez y Salva de la Cruz analizan al nuevo delantero del CD Castellón

El madrileño Jesús de Miguel presiona a un zaguero del Eldense durante el partido del domingo en Castalia.

El madrileño Jesús de Miguel presiona a un zaguero del Eldense durante el partido del domingo en Castalia. / Erik Pradas

Enrique Ballester

Enrique Ballester

No marcó, pero no importa. Jesús de Miguel, el nuevo delantero del CD Castellón, tuvo una aportación decisiva en la victoria contra el Eldense. Castalia descubrió su valía en una prueba de fuego, contra el líder, donde el madrileño De Miguel resultó clave en las acciones que gestaron los dos tantos de los albinegros.

En el primero, De Miguel filtró un pase perfecto entre las piernas del rival para iluminar la llegada al área de Isra Suero. El resultado: falta, expulsión y 1-0. En el segundo, ganó el salto en el área para descolgar la bola a Kochorashvili, que anotó a quemarropa el 2-0. Cuando fue sustituido por Fabrício en el minuto 79, Castalia premió su labor con una de las ovaciones de la tarde.

«Me he sentido cómodo», resumió De Miguel, que debutaba en Castalia tras disputar unos minutos a domicilio en el anterior duelo. «Era un partido importante, la afición ha estado impresionante y yo aún tengo que conocer mejor a mis compañeros», resumió el delantero, gran apuesta del club en el mercado de invierno. La entidad que preside Haralabos Voulgaris evita confirmar las cifras de una operación que, desde Salamanca, cifran en 145.000 euros.

Así lo ven sus compañeros

A Unionistas de Salamanca, en Primera RFEF, llegó la temporada pasada tras un largo periplo por el fútbol madrileño, que incluye formación en el Leganés y pasos por el Inter, Unión Adarve, Fuenlabrada o Navalcarnero, siempre entre Segunda B y Tercera. En Unionistas, además de destaparse de cara a puerta (12 goles en Liga), coincidió con Manu Sánchez, hoy lateral derecho de los albinegros.

«Es un chico tímido, de pocas palabras, una persona muy sencilla que no gasta un gramo de energía en llamar la atención», explica Manu sobre su compañero. «Pero en el campo cambia completamente, es un tipo que compite con mucha energía, con mucha garra y que si se tiene que enfadar para imponerse, se enfada», añade.

Esas dos caras de De Miguel, que ha llegado a Castelló con 26 años, se complementan en equilibrio perfecto. «Aunque sea callado, cuando en el vestuario piensa que debe decir algo, sus opiniones tienen sentido», matiza Manu. «Y en el campo, ya contra el Eldense se vio muy claro: entiende muy bien el juego de espaldas, sabe quedársela, sabe aguantarla, sabe jugar al primer toque y sabe romper una línea viniendo de tercer hombre. Es muy inteligente y sabe interpretar el juego. Es difícil encontrar jugadores así», desgrana el lateral diestro. 

Pese a la ausencia de gol, Manu Sánchez destaca la participación del tallo Jesús de Miguel (1,89 m) en los tantos, y aventura acierto goleador en breve: «Dentro del área es gol y pegada, por arriba o por abajo, le da igual. Se hace muy duro para los centrales y se coloca muy bien. Disfruta en el juego mental con el defensa».

En Salamanca, el zurdo De Miguel coincidió también con Salva de la Cruz, portero del Castellón hace una década. De la Cruz, que supera los 200 partidos en la categoría de bronce y es el actual meta de Unionistas, vivía muy cerca de De Jesús en una ciudad dormitorio junto a Salamanca. En una de esas confesiones entre futbolistas, el delantero le comentó que veía difícil entrar en el equipo, al tener por delante a jugadores veteranos. «Le dije que no se preocupara, que tal y como le veía entrenar, cuando tuviera la oportunidad no le iba a quitar ni Dios, y así fue», recuerda. 

El castellonense coincide con Manu en el análisis de De Jesús («es muy reservado, a veces le costaba hasta dar los buenos días, pero con confianza es un tipo alegre»), al que compara con el también delantero Enric Gallego: «A nosotros nos dio muchísimos puntos el año pasado. Con el balón es poderoso en el juego aéreo y hábil con los pies, va bien a la espalda y además es muy generoso en el trabajo, ayuda muchísimo en la presión a los centrales. Es muy completo, ya veía que podía prosperar en categorías superiores». A eso ha venido a la Plana.