AFECTADOS POR LAS LLUVIAS TORRENCIALES DE NOVIEMBRE

140.000 € para arreglar los colectores y pozos dañados en Xert y la Pobla de Benifassà

Diputación ejecutará obras de emergencia en las depuradoras de ambos municipios

Las intensas lluvias del mes de noviembre provocaron la rotura de colectores en las depuradores de Xert y la Pobla. | MEDITERRÁNEO

Las intensas lluvias del mes de noviembre provocaron la rotura de colectores en las depuradores de Xert y la Pobla. | MEDITERRÁNEO / r. d. m. / j. c.

R. D. M.

La Diputación de Castellón ha aprobado realizar trabajos de emergencia para restaurar las infraestructuras de las estaciones depuradoras de los municipios de la Pobla de Benifassà y Xert, que resultaron gravemente afectadas por las intensas lluvias de los pasados 11 y 12 de noviembre, que ocasionaron daños en los colectores, así como también en los pozos de estas dos localidades del interior.

El diputado provincial de Sostenibilidad, Ignasi Garcia, destaca que la intervención que impulsa la institución tiene por objetivo «recuperar la funcionalidad de las depuradoras de Xert y la Pobla de Benifassà y, de esta forma, evitar que parte o la totalidad de las aguas residuales acaben en el medio natural, con el riesgo que supone de contaminación del entorno y, evidentemente, de los espacios fluviales», hace hincapié.

Informe técnico

Según detalla el informe técnico realizado por el personal de Facsa, la empresa encargada del servicio de funcionamiento y mantenimiento de las estaciones depuradoras de los municipios de Castellón con población inferior a los 5.000 habitantes, han detectado que hay tramos del colector que han sido arrastrados y otros donde estaba obstruido por piedras y gravas de diferentes medidas, así como en pozos de registro, que han sido arrancados y también obstruidos.

El importe estimado para ejecutar las tareas necesarias para devolver a la normalidad las funciones propias de ambas depuradores asciende a 139.202,07 euros. Una intervención que Garcia reitera que se debe llevar a cabo con la máxima celeridad posible para evitar daños tanto a la flora como a la fauna del entorno en cuestión, ya que en el caso de Xert, en estos momentos, vierten parte de las aguas residuales sin depurar, y en la Pobla de Benifassà la totalidad de estos residuos, al dominio público hidráulico.

Tromba de agua

La zona registró a mediados de noviembre intensas precipitaciones, próximas a 400 litros por metro cuadrado en menos de 48 horas, lo que originó el colapso de los colectores de las plantas de depuración, con la consiguiente rotura, que ahora deben sustituir y renovar para que funcionen correctamente.