El Ministerio de Fomento mantiene la conclusión de las obras en el tramo del corredor mediterráneo entre Castellón y Vandellós en el 2020... a pesar de que lleva retraso en la fecha en que dijo que licitaría la misma.

El secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, reiteró ayer en el V Encuentro del corredor ferroviario del mediterráneo, celebrado en Barcelona, que es en el 2020, aunque «a finales», cuando prevén tener concluidos los trabajos en el eje desde la frontera francesa hasta València. Pero, de momento, ya se ha superado el plazo para licitar las obras. Según anunció el ministro Íñigo de la Serna en Murcia en septiembre, estas deberían haber salido a concurso «en el primer trimestre» del 2018.

De hecho, aún no se conoce siquiera el contenido del nuevo proyecto --que contempla el cambio del ancho ibérico al internacional en las dos vías entre Castellón y Vandellós-- y que debía estar concluido a finales del 2017.

En cuanto a las obras propiamente dichas, a pesar de que hasta ahora se había mantenido que el tramo Castellón-Vandellós sería el último en cambiar de ancho, ayer Gómez-Pomar señaló que será finalmente la variante de Vila-seca (el nuevo trazado entre Vandellós y Tarragona), la última en contar con el ancho internacional. Es precisamente este recorrido el que esperan tener concluido a finales del 2020.

Esta variante, cuyas obras acabaron el año pasado y que pondrá fin al único tramo de vía única del Corredor, está actualmente en pruebas. Se trata de una doble vía en ancho ibérico que cuando entre en funcionamiento servirá para recortar una media hora al recorrido del Euromed.

De momento, en Fomento todavía no concretan cuando se podrá abrir a la explotación comercial --el secretario de Estado de Infraestructuras dijo ayer que será «lo antes posible»-- a pesar de que las pruebas comenzaron a mediados de diciembre y de que estas tan solo atañen al ancho de vía ibérico. Y es que será posteriormente, como se ha dicho, cuando se instale el tercer carril.