Los secretarios generales de UGT-PV, Ismael Sáez, y CCOO PV, Arturo León, junto al president de la Generalitat, Ximo Puig, la vicepresidenta, Mónica Oltra, y varios miembros del Consell participaron ayer en la manifestación del 1 de mayo, que concentró a varios miles de personas por las calles de València en protesta por la precariedad laboral y en reivindicación de mayores salarios y pensiones dignas.

Bajo el lema Tiempo de ganar. Igualdad. Mejor empleo. Mayores salarios. Pensiones dignas, la pancarta conjunta de ambos sindicatos encabezó la marcha en un ambiente festivo, en el que no faltaron críticas contra la sentencia de la Manada, con carteles en los que se leía «no es no», «nosotras somos la manada» o «yo sí te creo».

El secretario general del UGT-PV denunció que los trabajadores están «penalizados» por una reforma laboral que «hace imposible que los salarios crezcan», mientras que su homólogo en CCOO-PV pidió a las organizaciones empresariales y al Gobierno que sean «sensibles» a sus propuestas «justas y razonables para cambiar la precariedad laboral» y defendió el camino hacia «la recuperación de derechos y el cambio de modelo productivo».

Tanto Oltra como Puig aseguraron que se trataba de un día «festivo y reivindicativo» y según el president, están «muy lejos» de la plena ocupación, por lo que la reivindicación y los sindicatos son «absolutamente necesarios».

EL PP VALORA LOS AVANCES // Desde Castellón, el presidente provincial del PP, Miguel Barrachina, señaló ayer que el Primero de Mayo es un buen día «para celebrar los 32.000 empleos nuevos creados» gracias a los cambios emprendidos en solitario por su partido. El dirigente popular recordó que el 70% del empleo en la provincia ya es fijo gracias a las reformas.