Las cerezas son pequeñas frutas redondas y jugosas que ofrecen una variedad de propiedades beneficiosas para la salud. Son ricas en antioxidantes, como los polifenoles y antocianinas, que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres. Estos compuestos antioxidantes pueden contribuir a la prevención de enfermedades crónicas y el envejecimiento prematuro.
Además de sus propiedades antioxidantes, las cerezas también tienen propiedades antiinflamatorias. Esto significa que pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, lo cual es beneficioso para la salud en general. La inflamación crónica está relacionada con diversas enfermedades, como la artritis, enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer. Consumir cerezas regularmente puede ayudar a combatir esta inflamación y reducir el riesgo de enfermedades asociadas.
Las cerezas también son una buena fuente de fibra dietética, lo que favorece la salud digestiva y ayuda a mantener un sistema digestivo saludable. La fibra promueve la regularidad intestinal y previene problemas como el estreñimiento. Es importante remarcar que las cerezas son bajas en calorías y contienen una buena cantidad de vitaminas y minerales esenciales. Son especialmente ricas en vitamina C, que es importante para el sistema inmunológico, y en potasio, que es esencial para la función muscular y la salud cardiovascular.
También se ha demostrado que las cerezas tienen propiedades antidiabéticas y beneficios para la salud cerebral. Algunos estudios sugieren que los compuestos presentes en las cerezas pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre y mejorar la función cognitiva y la memoria.
Época de cerezas
En resumen, las cerezas son una fruta deliciosa y nutritiva que ofrece una variedad de propiedades beneficiosas para la salud. Su contenido de antioxidantes, propiedades antiinflamatorias, fibra y nutrientes esenciales las convierten en una opción saludable para incluir en una dieta equilibrada.
La mejor época para disfrutar de cerezas en España es durante los meses de primavera y verano, específicamente entre mayo y julio. Es en esta temporada cuando las cerezas están en plena madurez y alcanzan su máximo sabor y dulzura.
Se aprovecha todo
Por si no fuera suficiente con todo lo dicho anteriormente, lo que tradicionalmente desechamos de las cerezas como son sus rabitos y sus huesos cuentan con propiedades que pueden ser beneficiosas. Comenzamos con los rabitos: Cuando te duela la cabeza, hiérvelos y bebe caliente el líquido resultante; tu dolor se calmará a los pocos minutos.
En lo que respecta a los huesos son beneficiosos para calmar nuestros nervios. Una forma de relajarte rápidamente y bien sencilla es hacer rodar con tus dedos y sobre la palma de la mano contraria algo redondo; lleva siempre en tu bolso una canica o el hueso de una cereza o una bolita de madera. En cuanto notes que los nervios están a flor de piel, hazla rodar y verás calmar tu estado de ansiedad.
