El panorama gastronómico en Castellón es muy dinámico. Aperturas, cierres y traslados de restaurantes se suceden, y a veces hay que pararse a hacer balance y actualizar nuestro mapa del comer y del beber. Cara a la primavera hay bastantes novedades a reseñar.
Es precisamente cuando llega el calor el momento en el que Benicàssim multiplica su oferta. Una de las aperturas, prevista para Semana Santa, que seguro dará más que hablar es la del restaurante Santa Rita. Situado en la ermita que hay cerca del puente de hierro, promete ambientes sofisticados y cocina mediterránea.
No es una apertura --de hecho, es un clásico--, pero sí que vuelve después de mucho tiempo Ciento2. Cerró en septiembre del 2023 y ha abierto de nuevo, con aires renovados, este mes de marzo. Habrá que esperar más para conocer el proyecto del propietario de Mala Pecora, una pizzería que se situará justo enfrente y que se llamará Che fame di luppo.
También hay movimiento en Alcossebre. En pleno centro de la localidad ha empezado a funcionar Vermuda, un local donde los propietarios de Atalaya muestran su lado más desenfadado, con gusto por el vermouth y los platos para compartir. Por cierto, que Alejandra Herrador y Emanuel Carlucci han hecho obras de mejora en su local. ¿Será que están buscando la segunda estrella?
Fast food en Castelló
En la capital de la Plana hay un importante aterrizaje de locales de fast food. Un ejemplo es Huggers, una hamburguesería que ocupa los bajos de Escultor Viciano 1 y que vende «frescura» y productos de proximidad. Otra, RBTS, se ha instalado en la avenida Rey don Jaime, que en los últimos años se ha llenado de establecimientos de comida rápida de todo tipo: tailandesa, mexicana, japonesa... En la calle Gasset, a la altura del Casino Antiguo, se anuncia la apertura de un wok.
No muy lejos de allí, en Santos Vivanco, los responsables de Macameu ianuguraron este mes su segundo local, Macameu Blasón, en honor del restaurante que ocupaba esa ubicación.
Dos noticias para los amantes de la pizza. Una, la apertura de la conocida cadena Ginos en la calle Asensi. La otra, el cambio de local de Le Otto, aunque se trasladará solo unos metros, a un bajo junto al hotel Mindoro.
Aperturas y cierres
La mala noticia es el cierre definitivo de La Casa Encesa en Maestro Ripollés. Para seguir disfrutando de la imaginativa cocina de Mikel Estíbariz habrá que volver al local que tiene en el casco antiguo de Orpesa.
De lo sólido a lo líquido. Los amantes del vino podrán acudir a partir del mes de abril a Le Clos, una tienda en la que además de vender organizarán catas y servirán botellas por copas. Su dirección, la calle Poeta Guimerà 2 (el antiguo local del Café de Flandes).
En Els Ports lamentan el cierre de dos locales: la Taverna del Forn de Vilafranca, que en diciembre se trasladó a Benicàssim; y el de un clásico de Morella, La Fonda, que incluso llegó a contar con un Solete de Repsol.
