Benicàssim, siente la música

Estando en el ecuador del verano ya podemos avanzar que todos los indicadores apuntan a que esta está siendo una buena campaña de verano y que será una buena temporada, en términos de ocupación hotelera y turística, para Benicàssim.

Un balance provisional más que positivo para un destino como Benicàssim donde el turismo, además de actuar como catalizador de crecimiento económico, generador de empleo e impulsor de la actividad empresarial local, contribuye notablemente a la dinamización social, siendo un verano más el lugar referente donde muchos vienen a disfrutar y quieren estar.

Convertirnos en el epicentro del ocio y donde poder disfrutar haciendo mil planes los largos días de verano supone un esfuerzo, trabajo y dedicación constante, durante todo el año. Requiere ser muy respetuoso con nuestro entorno natural y cuidar cada acción que emprendemos para que proyecte al mundo la mejor imagen de nuestro destino.

Así pues, alineados con los objetivos de la Agenda 2030, apostamos por un modelo turístico responsable basado en la sostenibilidad ambiental, económica y social, elevando la autoexigencia y marcando ese plus de diferencia en nuestro trabajo diario. Solo así lograremos que todos cuantos nos visiten se lleven una buena percepción, nos recuerden y queden con ganas de volver, porque Benicàssim es para vivirlo.

Junto con nuestras playas, cultura, patrimonio y gastronomía de calidad, llevamos muchos años apostando por hacer de la música otra de las señas de identidad de Benicàssim.

Benicàssim destaca por su pasión por la cultura y el amor por la música. Así, a lo largo de 50 años ha consolidado una reputación de eventos de calidad que ha convertido la ciudad en un lugar emblemático y reconocido por la celebración de festivales y eventos musicales ganándose, por mérito propio, la etiqueta de tierra de festivales.

Nuestra apuesta por programar una intensa agenda cultural y de calidad se ve incrementada durante los meses de verano y ello, no solo nos ha permitido convertirnos en sede de grandes festivales de música sino que, además, en una clara apuesta por acercar la música a todos y diversificar la oferta, celebramos eventos de diferentes y variados géneros musicales y, lo que es más importante, para que puedan ser disfrutados por todo tipo de público.

Citas fuertes

Además de los tradicionales conciertos de verano que nos ofrece la Unión Musical Santa Cecilia a orilla del mar, también el Mediterráneo se ha vestido de gala con las bandas sonoras del mejor cine a cargo de la Orquesta Sinfónica Belles Arts, llenando de ambiente el anfiteatro Pepe Falomir. Y este agosto que acabamos de iniciar, ponemos en valor el Belle Canto a través del Festival Lírico Ópera Benicàssim que ya ha cumplido XV ediciones, consolidándose como una de las citas fuertes del verano.

También Benicàssim se convierte estos días en sede internacional de los cursos de verano de Cordes a la Mar, donde los alumnos participantes pueden, de la mano de prestigiosos profesores, conectar y hacer música juntos al tiempo que formarse en un ambiente distendido, relajado y estimulante. Nueve ediciones que nos convierten en lugar de encuentro para el conocimiento musical, con clases y diversión junto a nuestras playas.

No acabará el mes sin que los ritmos jamaicanos del más puro reggae, llegados a nuestra ciudad de la mano del Rototom Sunsplash, den paso a los acordes del Maestro Francisco Tàrrega e inunden, a través del Certemen Internacional que lleva su nombre, las veladas de final de agosto en su 56ª edición.

Como ven, cada verano nuestra ciudad se convierte en punto de encuentro con diferentes propuestas musicales con renombre nacional y proyección internacional, elevando la reputación de Benicàsim como una de las indiscutibles capitales de la música en vivo y haciendo nuestra la frase del filósofo Friedrich Nietzsche, porque también estamos convencidos de que «sin música, la vida sería un error».

Alcaldesa de Benicàssim

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