A FONDO

Bailando con lobos

El PSOE no se presentó a las elecciones con la promesa de aprobar una amnistía

Susana Marqués

Susana Marqués

Miren si tiene prisa el presidente Pedro Sánchez en pagar el peaje que le han impuesto sus socios independentistas a cambio de mantenerle en la Moncloa que, este mes de enero, el regalito que les ha pedido a los Reyes Magos --y que pretende hacernos a todos los españoles--, es despachar rápidamente el trámite parlamentario de esa ley de amnistía, negada por activa y por pasiva, y que pretende liquidar cuanto antes con una tramitación rápida, pactada y exigida, por quienes le prestaron siete votos para mantenerle en la poltrona.

La verdad incómoda es que el PSOE no se presentó a las elecciones con la promesa de aprobar una amnistía, ni la mayoría de españoles parecen entenderlo, pero los voceros del sanchismo aquí en Benicàssim y en el resto de España se desgañitan pretendiendo blanquearla aunque sea a base de litros de hipoclorito de sodio para engañarnos a todos y lo que es más grave, a sus propios electores.

Y es que la ley de amnistía pretende que uno pueda romper las reglas del juego dadas, retorcer el ordenamiento jurídico y saltarse la igualdad que garantiza nuestra Constitución, cuando quiera y sin ningún tipo de consecuencia. Por ello, desde el Partido Popular se ha presentado una enmienda a la totalidad de esta ley, porque nosotros sí que creemos de verdad que hay otra manera de gobernar que no sea la de vendernos y doblegarnos a los nacionalismos más radicales de quienes quieren dividir España, levantando muros en lugar de tender puentes de concordia, consenso y lealtad.

En aras a proteger la unidad de España y la libertad e igualdad de todos los españoles, proponemos que se tipifique la «deslealtad constitucional» como paso previo para penar a aquellos que pretendan perjudicar la unidad de nuestro país, incitar declaraciones de independencia y referéndum y consultas ilegales, promoviendo la disolución de cuantas organizaciones o personas pretendan llevarlas a cabo.

Prófugo de la justicia

Pero algo me dice que, la simple mayoría aritmética que le ha permitido a Sánchez seguir siendo presidente no lo va a aceptar, puesto que este gobierno nació rehén y vive plegado a los designios de un prófugo de la justicia que, telemando en mano, gobierna España desde Bruselas. Como tampoco lo van a permitir los de Arnaldo Otegi cuyo objetivo es ahogar la voz de generaciones enteras que luchamos, con las manos blancas, por la dignidad y la justicia y por el fin del terrorismo de ETA.

Pero ya se sabe, al Sr. Sánchez le sobra ambición y le falta esa altura de miras políticas que tienen otros gobernantes de países de nuestro entorno como Alemania, Francia o Portugal, que mantienen la aplicación de un verdadero cordón sanitario a sus Constituciones para que nada, ni nadie, pueda alentar contra la unidad de sus países.

Mientras, aquí seguirán entreteniéndonos con noticias de piñatas, eso sí, de mal gusto, para desviarnos la atención de la verdadera gravedad de los hechos que se han estado produciendo en plenas fiestas navideñas, habilitando el mes de enero para tramitar de urgencia la aprobación de una ley de amnistía que solo obedece a la necesidad de dar el contento a unos socios de gobierno que le aprietan y al interés personal de un presidente que sabe que, habiendo perdido las elecciones, está dispuesto a bailar con lobos con tal de conservar el poder.

Secesión

Resulta paradójico que, los adalides de la memoria histórica necesiten aprobar urgentemente una ley para que todos aquellos delitos ocurridos se nos olviden. Porque delitos como los de aquellos que rompieron la convivencia y encendieron las calles, ahora van a quedar impunes, todo para obligarnos a reconocer que el proceso de secesión de Cataluña estaba justificado y que los tribunales fueron injustos reprimiéndolos, buscando quebrar el principio de seguridad jurídica que emana de nuestra Constitución.

Miren, la triste realidad es que esta ley no obedece al interés general, si no solo a la necesidad de un presidente cuyos socios ya le han anunciado que el siguiente pago será el referéndum de independencia.

Alcaldesa de Benicàssim y senadora