PortCastelló busca ser líder en el transporte de corta distancia

La actividad de los puertos suele ir asociada a grandes rutas que recorren varios continentes para mover mercancías. Pero estas instalaciones también pueden acoger buena parte del tráfico que ahora se realiza por carretera, mediante la creación de rutas de corta distancia, que contribuyan al objetivo de la Comisión Europea de reducir hasta en un 30% el paso de camiones en el horizonte del 2030. PortCastelló tiene oportunidades de crecimiento en este campo, como ayer expuso su presidente, Rubén Ibáñez. "El transporte de corta distancia es el hábitat habitual de nuestro puerto, donde mejor nos movemos, por lo que ambicionamos a liderar" este apartado, comentó.

PortCastelló licitará en mayo la estación intermodal

Participantes

Entre los participantes hubo representantes de compañías que tienen rutas entre Castellón y el norte de África, o con Italia para exportar cerámica, quienes expusieron las posibilidades de llevar mercancías con el sur de España o Portugal a través del barco.

Rubén Ibáñez destacó que el transporte del futuro será intermodal, algo en los que trabaja PortCastelló con los nuevos accesos ferroviarios y la estación. El presidente de los empresarios del transporte de la provincia, Carmelo Martínez, dijo que esta intermodalidad "no es una competencia, sino un complemento".

PortCastelló dispondrá de 450.000 metros cuadrados para materiales de eólica marina

Plan de expansión

Además, se detalló el proyecto de que el puerto sea un lugar de referencia para el desarrollo de parques eólicos marinos en Europa. Un plan que necesita de los puertos para montar piezas y generar actividad industrial, y en el que encaja la dársena sur de PortCastelló.

Rubén Ibáñez señaló que la apuesta por el sector eólico marino "aportará tráfico de importación y de exportación", dado que hay que importar las piezas necesarias para su ensamblaje para su posterior envío a los países de destino.

Estrategia energética

De esta forma PortCastelló se alinea con la estrategia de la Unión Europea que ha establecido el objetivo de producir al menos el 45% de su energía a partir de fuentes renovables para el año 2030. La energía eólica marina desempeñará un papel importante en la consecución de este objetivo, como se recoge en la Estrategia de la Unión para la energía renovable marina aprobada por el parlamento europeo que persigue dos objetivos: descarbonizar la producción eléctrica y reducir la dependencia del continente a los hidrocarburos rusos.

En el corto plazo Europa ha establecido como objetivo tener al menos 111 GW de capacidad instalada de energía eólica marina para el año 2030, lo que supone más de un 100% de incremento sobre el objetivo inicial.